Volkswagen ha desvelado en el Salón del Automóvil IAA de Múnich el prototipo del Volkswagen ID.Life. Se trata de un coche eléctrico asequible y de reducidas dimensiones, pensado para desplazarse diariamente en la ciudad.
El prototipo es un primer vistazo al modelo de serie definitivo que llegará por 20.000 euros en 2025, posiblemente con otro nombre. "Es nuestra visión de la próxima generación de la movilidad urbana totalmente eléctrica”, aseguró el CEO de Volkswagen, Ralf Brandstätter.
Las líneas futuristas y juveniles destacan casi tanto como su precio agresivo. El lenguaje de diseño del Volkswagen ID.Life presenta nulas similitudes con los ID.3 e ID.4, que la firma alemana ofrece en distintas partes el mundo. En cambio, este prototipo luce similar al Honda e.
En este crossover urbano destacan los materiales ecológicos. Por ejemplo, el techo desmontable y el capó están hechos de botellas PET recicladas. La carrocería, por su pate, luce una capa de virutas de madera como colorante natural y un endurecedor biológico.
Claramente, este no es el único aspecto "amigable" con la naturaleza del Volkswagen ID.Life. Su sistema de propulsión de cero emisiones es parte de la estrategia Accelerate con la que Volkswagen busca que el 70% de los coches que venda en Europa sean totalmente eléctricos en 2030.
Volkswagen ID.Life: motor, batería y autonomía
En cuanto a la motorización, cuenta con un motor eléctrico de 172 kW (234 CV) de potencia. De esta forma, el Volkswagen ID. Life será capaz de pasar de ceo a 100 km/h en tan solo 6,9 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 180 km/h.
La batería del Volkswagen ID.Life será de 57 kWh, una opción ya conocida dentro de los otros ID que ofrece la compañía, y ofrecerá una autonomía de 400 kilómetros según el ciclo de homologación de consumos WLTP.
Como se menciona al principio, el entretenimiento será uno de los pilares de este nuevo coche. El Volkswagen ID.Life se podrá convertir en una sala de cine, que permitirá proyectar películas o jugar videojuegos.
Para maximizar la experiencia de los pasajeros, ciertamente con el coche detenido, los respaldos del Volkswagen ID.Life se podrán plegar. Además, también se podrán convertir en una cama para relajarse inmediatamente.
En el interior, los botones brillan por su ausencia. El volante contará con una pantalla táctil desde la cual se podrán controlar algunas de las funciones de conducción, entretenimiento y confort del coche.
Lo cierto es que posiblemente muchas de las características mencionadas no lleguen al modelo de serie. No obstante, es una buena forma de ver cómo el Volkswagen ID.Life forma parte de los planes de la compañía en su apuesta por lo eléctrico.