Honda ha anunciado que sus próximos vehículos llegarán con el sistema operativo de Google para el automóvil, Android Automotive, como fruto de una colaboración entre el fabricante japonés y la compañía de Mountain View. Los primeros coches con la mencionada plataforma comenzarán a venderse en 2022, aunque se desconocen los modelos.
Hasta ahora, Honda ha utilizado un sistema operativo propio para sus vehículos más modernos. Este está basado en Android, que es de código abierto. Las funciones, sin embargo, son más limitadas al no incluir los servicios de Google. Con Android Automotive, el fabricante japonés podrá mantener las prestaciones de su sistema operativo, además de la posibilidad de utilizar las funciones que la compañía americana desarrolla para utilizar en el coche.
De hecho, Honda ha resaltado que añadir Android Automotive tiene como objetivo brindar una mejor experiencia gracias a las funcionalidades que ofrece Google. "Colaboraremos con Google para integrar mejor los servicios a bordo de Google en nuestros vehículos, incluida la capacidad de utilizar más fácilmente funciones como Google Assistant, la funcionalidad de Google Maps y otras aplicaciones a bordo del vehículo ofrecidas a través de Google Play", ha destacado un portavoz a través de un correo enviado a The Verge.
Honda no es el único fabricante que apostará por Android Automotive. A principios de año, Ford confirmó que todos los modelos lanzados a partir de 2023, incluso los más económicos, llegarán con esta plataforma.
Honda apuesta por Android Automotive: más completo e intuitivo que Android Auto
Android Automotive es muy diferente a Android Auto. En este caso, el sistema operativo que Honda pretende incluir en sus vehículos no necesita conexión a un smartphone, como sí sucede con Android Auto. Automotive, además, puede integrar los controles como el aire acondicionado, sistemas de aparcamiento, configuración de asientos, etc. Con la posibilidad, además, de utilizar las aplicaciones de google para el coche. También sincronizar el smartphone para recibir llamadas y notificaciones o hacer uso del asistente de Google.
Android Auto, en cambio, destaca por la posibilidad de utilizar aplicaciones o enlazar el smartphone en la pantalla del coche para mejorar la experiencia en la conducción. Esta herramienta, sin embargo, es más limitada. No ofrecen los controles del automóvil y necesita un móvil conectado a través de un cable o de forma inalámbrica para que pueda funcionar.