Para combatir el cáncer, es importante dar con fármacos que ataquen a las células tumorales lo más específicamente posible. Así, se evitarían muchos de los efectos secundarios que por ejemplo tienen lugar con la quimioterapia. Pero eso no es lo único que debe buscar la ciencia. También es importante comprobar que esos tratamientos contra el cáncer están siendo efectivos. Y cuanto más rápido, mejor.

Cada paciente es diferente y los fármacos que a uno le resulten efectivos pueden ser inútiles para otro. Para saber cuándo están actuando correctamente, existen ya determinadas técnicas, la mayoría basadas en el análisis de muestras extraídas mediante biopsia. Sin embargo, este es un método muy invasivo y relativamente lento. 

Por eso, un equipo de científicos de la Universidad Nacional de Singapur ha desarrollado un novedoso método basado en la nanotecnología, que puede identificar la efectividad de un tratamiento en solo una hora y con nada más que una muestra de sangre de los pacientes. Sus resultados se han publicado en Nature Nanotechnology.

Quimioterapia y otros tratamientos individualizados

No importa si es cáncer de garganta, de pulmón, de mama o cualquier otro. Cada tumor es diferente. Por eso, los tratamientos como la quimioterapia también deben serlo. Y es importante saber lo antes posible si lo están haciendo bien. Así, habrá algo más de margen para buscar otras alternativas.

Para lograrlo, los autores de este estudio reciente han ideado un mecanismo al que han bautizado como monitorización de la ocupación química de moléculas pequeñas en vesículas extracelulares y de la expresión de proteínas (ExoSCOPE). Este se basa en la búsqueda de pequeñas vesículas excretadas por las células tumorales. Si la quimioterapia o el fármaco en cuestión han acertado en la diana, habrá pequeñas trazas en esas vesículas. Si no, se liberarán igualmente, pero sin restos del medicamento.

Los tratamientos contra el cáncer deben ser individualizados

Estas vesículas tienen un diámetro 100 veces menor que el de un pelo humano. No pueden verse con microscopios convencionales. Por eso, han desarrollado un método que utiliza nanoanillos de oro para amplificar las señales emitidas por las drogas contenidas en ellas.

Lo bueno es que se puede monitorizar cómo avanza el tratamiento contra el cáncer con el paso del tiempo. Así, es posible determinar si está actuando correctamente.

Rápido y eficaz

En el estudio, estos científicos citan que analizaron ExoSCOPE en un ensayo clínico con 106 pacientes de cáncer de pulmón. 

Con una sola muestra de sangre de cada uno de ellos, pudieron realizar la prueba en una hora, determinando si la quimioterapia empleada estaba siendo eficaz. De hecho, determinaron un 95% de los aciertos en las células diana que se obtuvieron con los mecanismo convencionales. Eso sí, mucho más rápido.

Los ensayos clínicos se realizaron con 106 pacientes de cáncer de pulmón

Son unos resultados muy esperanzadores; ya que, si siguen así, creen que su método se podría llevar a la práctica clínica en tres años. Y lo mejor es que piensan que podría ser útil para determinar la eficacia de fármacos contra otras enfermedades, más allá del cáncer.

En medicina el tiempo es oro. Ahora, gracias a este hallazgo, los médicos podrían disponer de horas muy valiosas para dar con el fármaco perfecto para cada enfermo.