Desde el pasado 14 de mayo, China tiene su propio rover en la superficie de Marte. El explorador, bautizado Zhurong, amartizó en el hemisferio norte del planeta rojo, en un sector conocido como Utopia Planitia, y ya envió sus primeras imágenes desde el lugar.
La Administración Espacial Nacional China (CNSA) dio a conocer dos fotografías que llegaron desde el rover, durante sus primeras tareas en Marte. Una de ellas fue tomada frente a la rampa de descenso, y la restante desde una cámara de navegación del vehículo.
De esta manera, China ya tiene su propio "laboratorio" instalado en la superficie marciana. A través del rover Zhurong, el gigante asiático puede comenzar con el cronograma de misiones planificadas para los próximos tres meses. En principio, la CNSA tiene por objetivo investigar el clima y la geología del vecino planeta.
Las primeras imágenes que el rover Zhurong envió a la Tierra
Las fotografías enviadas por el rover chino permiten apreciar claramente algunas de las primeras actividades post-amartizaje. La imagen en blanco y negro la tomó una de las cámaras instaladas en Zhurong para evadir obstáculos. En la misma se aprecia la rampa desplegada desde el módulo de amartizaje, para que el vehículo ponga sus ruedas sobre Marte.
La fotografía restante, y a color, se tomó con una cámara de navegación ubicada en la parte trasera del explorador marciano. Allí no solamente se ven desplegados los paneles solares y la antena del rover, sino también la superficie del planeta rojo en todo su esplendor.
Un punto importante a remarcar es que China no se ha limitado a mostrar las primeras dos imágenes que el rover Zhurong tomó en Marte. La CNSA también compartió animaciones correspondientes al proceso de separación del rover y el módulo de amartizaje, a partir de grabaciones realizadas por el orbitador.
El rover Zhurong es parte de la misión Tianwen-1 de la Administración Espacial Nacional China, que partió desde la Tierra en julio de 2020. Con la exitosa llegada a la superficie del planeta el pasado viernes, China se convirtió en el tercer país en la historia en conseguir un amartizaje suave, detrás de la Unión Soviética y Estados Unidos.
