LG ha anunciado este lunes el cierre de su división de smartphones. La decisión, aprobada por el Consejo de Administración de la compañía, supone el fin de uno de los fabricantes de teléfonos móviles más populares del sector, especialmente durante los años previos al auge de marcas chinas como Xiaomi, Huawei u Oppo. La fecha efectiva de cierre está prevista para el 31 de julio de este año.

"Este movimiento permitirá a LG dedicar más recursos a otras áreas en crecimiento, como componentes de vehículos, dispositivos conectados, smart homes, robótica, inteligencia artificial y soluciones y servicios B2B", ha señalado la marca en un comunicado.

Tras este anuncio, LG no lanzará nuevos modelos al mercado, pero sí dará soporte a todos aquellos smartphones que ha vendido a lo largo de los últimos años. Esto incluye piezas de recambio, actualizaciones de software, etc. La marca, asimismo, ha indicado que, durante un periodo de tiempo indeterminado, se podrán comprar algunos de los modelos más recientes de la firma –hasta que se termine su stock–.

Pese a su salida del sector, LG asegura que seguirán desarrollando tecnologías relacionadas con el mismo. Entre ellas se incluye el 6G, el estándar de conectividad que, en algunos años, reemplazará al 5G.

La división de telefonía de LG estaba a la deriva

Teléfono enrollable de LG
LG Rollable

En enero, Kwon Bong-Seok, CEO de LG Electronics, reconoció en un comunicado interno que había llegado el momento de tomar una decisión sobre la división de telefonía móvil. En dicho texto, el ejecutivo también reveló que la compañía evaluaría diversos caminos, incluyendo la "venta, retirada o reducción de tamaño del negocio de smartphones".

La división de telefonía había registrado, en los últimos seis años, unas pérdidas de casi 4.500 millones de dólares. Su posición en el mercado, por otra parte, tampoco era esperanzadora. Según los datos de Counterpoint Research, LG distribuyó 24,7 millones de teléfonos durante 2020 –un 13% menos que en 2019–, lo que se tradujo en, aproximadamente, un 2% de cuota de mercado. Estas cifras contrastan con las de su compatriota Samsung, que distribuyó 255,7 millones de smartphones durante 2020.

LG ha sido una de las marcas más reconocidas en el sector de la telefonía móvil. En la era de los feature phones, llegó a hacerse un hueco entre los cinco fabricantes más populares del mundo. También fue una de las primeras empresas en apostar por Android, el sistema operativo que ahora domina la industria.

Su máximo esplendor en la época de los smartphones llegó de la mano del LG G2, un móvil muy aclamado por los expertos que también obtuvo buenos resultados en ventas. Dicho éxito, desafortunadamente, nunca volvió a repetirse. En los años posteriores, la marca trató de diferenciarse con productos como el LG G5 o, más recientemente, el LG Wing, pero ninguno de ellos llegó a surtir efecto. En paralelo, marcas como Xiaomi, Huawei y Oppo han experimentado un importante crecimiento gracias a su agresiva estrategia, lo que ha dificultado aún más el camino de LG.