Mide la mitad que una caja de zapatos y despegó rumbo a la órbita baja el pasado lunes, 22 de marzo, desde Kazajastán. Enxaneta es el primer nanosatélite enviado al espacio por parte de la Generalitat de Catalunya dentro de su estrategia NewSpace. A finales de este mismo año o principios del que viene, otro satélite de la NASA catalana saldrá al espacio. ¿Qué más podemos esperar de la estrategia NewSpace?

En realidad de NASA catalana no tiene nada, pero así se ha bautizado a la estrategia NewSpace. Aunque la realidad es que la Generalitat de Catalunya pretende con esta maniobra "favorecer el desarrollo de una nueva industria vinculada a los nanosatélites y que aproveche el talento que generamos", explica desde el otro lado de la línea telefónica Daniel Marco, director general de innovación y economía digital de la Generalitat. "Tenemos universidades con estudios aeroespaciales muy potentes y el problema de que la mayor parte de los talentos se van a trabajar fuera porque aquí no se podía. Y gracias a la estrategia NewSpace podemos aprovechar que todo el talento que generamos pueda revertir en la industria y que tengamos empresas que los contrates", indican.

Enxaneta

La Enxaneta es un cubesat de tres unidades (10x10x30 cm) y pesa menos de 10 kilos. Tiene unas pequeñas alas en las que se encuentran las placas solares, de las que se alimenta. Tiene una órbita polar, es decir, que pasa por los dos polos y viaja a 25.000 kilómetros/hora, es decir, 7 kilómetros/segundo. Da una vuelta a la Tierra completa cada 90 minutos. Se trata de un satélite que mejorará la conectividad de Internet y dará cobertura 5G, aunque hasta pasadas unas tres o cuatro semanas desde el lanzamiento no comenzará a estar operativa.

Enxaneta se ha desarrollado en apenas 3 meses

El desarrollo de Enxaneta ha estado al cargo de las empresas Open Cosmos y Sateliot y ha sido de tan solo tres meses, ya que ya se contaba con la tecnología necesaria para hacerlo, es decir, no se han tenido que hacer las piezas a medida como con misiones de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) o de la NASA, tal y como ha señalado en varias ocasiones Marco. Mientras estas misiones pueden tardar hasta diez años en desarrollarse, no sucede lo mismo con los nanosatélites. Enxaneta estará operativa unos tres o cuatro años antes de su renovación. Además, se encuentra a 500 kilómetros de la superficie de la Tierra, a diferencia de los satélites geoestacionarios, que operan a unos 35.000 km.

Interés social

Por otra parte, también ha generado interés social: “Casi todo el mundo está hablando de Enxaneta”, ha señalado Marco. Y en gran parte se ha debido al hecho de que desde la Generalitat se ha querido involucrar a la sociedad. Por ejemplo, el nombre ha sido elegido por los niños catalanes ha través de un programa para ellos que se emite en TV3. "El programa busca, entre otras cosas, crear vocaciones tecnológicas. Para motivar a los niños a conocer el mundo del espacio, hicimos que pusieran el nombre. Y gracias al nombre, a Enxaneta, se ha creado un poco ese impacto más social. El nombre ha llegado de manera masiva", señala.

"La Enxaneta es el niño o niña que se sitúan en la parte más alta de castellets y levantan la mano. Generalmente son niñas, ya que pesan menos", ha indicado el director a través del teléfono. El nombre casa muy bien con el cubesat ya que "es pequeño, va al espacio y ha sido una forma de que conecte con la gente de Cataluña".

Estrategia NewSpace

Cubesat de la NASA
Imagen de archivo de un cubesat de la NASA

La estrategia NewSpace no se queda solo en enviar a Enxaneta al espacio. A finales de este mismo año o principios del que viene, otro cubesat estará listo y a punto de salir al espacio. En este segundo caso, se tratará de un nanosatélite de observación terrestre.

Para potenciar la industria y evitar la fuga de talentos, la estrategia NewSpace se basa en tres ejes en los que el Govern puede apostar: "Desarrollar un instrumento de compra pública innovadora de inversión en misiones con cierto riesgo, que es lo que hemos hecho con el nanosatélites Enxaneta: invertir nosotros en contratar servicios que utilicen este tipo de satélites", señala. "El segundo eje es continuar apostando por la investigación y el desarrollo uniendo las capacidades que tenemos en el espacio, pero sobre todo con las capacidades digitales. La inteligencia artificial, principalmente". El tercer eje trata de "unir los esfuerzos de todo el ecosistema". Es decir, "generar una alianza con todos los agentes, por eso está implicada la Cámara de Comercio, las Universidades, el sector empresarial, las entidades públicas y los usuarios".

Enxaneta es la primera fase del primer objetivo de la Estrategia NewSpace, habrá un segundo satélite

Se comenzó a todo esto hace dos años, aunque hasta octubre de 2020 no se aprobó. Mientras un grupo de trabajo se dedicaba al desarrollo de la estrategia NewSpace de una manera más general; también se propusieron objetivos clave sobre la mesa. El primero, dividido en dos fases: la primera, lanzar Enxaneta y, la segunda, un satélite de observación terrestre.

Crear industria

"El objetivo de la Generalitat no es lanzar satélites para ofrecer servicios sino que haya una industria y a largo plazo solo tengamos que contratar servicios a las empresas. Por lo que, este concepto de compra pública de inversión en misiones con cierto riesgo -aunque en este caso está bastante madura la tecnología y no hay tanto riesgo- eran nuestras intenciones", comenta Marco.

"Queremos tener una pequeña constelación de seis nanosatélites en el espacio. El presupuesto total es de 18 millones de euros", indica Marco. Por ejemplo, el desarrollo de Enxaneta han sido, lanzamiento incluido, 500.000 mil euros. El segundo cubesat, el de observación terrestre, será el doble de grande y costará alrededor de 1,2 millones de euros. "En los próximos cuatro años tendremos esta pequeña constelación en marcha, pero esperamos que con la cooperación de las empresas vaya aumentando y que se ofrezcan más servicios que se complementarán entre ellos", añade.

Centro de control y pruebas de motores

Además, hay otros dos ámbitos de trabajo, según señala Marco. Por un lado, la estación de tierra, que es el lugar en el que se recogerán todos los datos de los nanosatélites. "Está en el Monsec, donde también tenemos un observatorio, en el norte de Cataluña. Allí vamos a desplegar más antenas y el centro de control para monitorización y seguimiento de satélites".

El otro ámbito de trabajo se va a desarrollar en el aeropuerto de Alguaire, en Lleida. "En este aeropuerto queremos desarrollar un centro empresarial para esta nueva industria y tendremos un centro de pruebas para motores de propulsión para cohetes más pequeños, no para el Soyuz, por ejemplo". No se harán lanzamientos verticales de los nanosatélites, para eso están los puertos espaciales, como el de Kurú en la Guayana Francesa. "Pangea será la primera empresa en probar sus motores de propulsión en Alguaire", comenta.

Por tanto, Cataluña quiere especializarse, en parte, en el desarrollo de nanosatélites, una industria que parece estar al alza. A pesar de la inversión inicial, una buena industria tecnológica hará que las personas con vocaciones científicas y tecnológicas no tengan que marcharse al extranjero a trabajar. En definitiva, siempre es buena noticia la inversión en ciencia, tecnología e innovación.