Hace un par de semanas, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) de Estados Unidos solicitó a Tesla llamar a revisión a 158.000 vehículos que podrían presentar fallos en la pantalla central. Para evitar cualquier problema con dicho organismo, los dirigidos por Elon Musk aceptaron voluntariamente hacer la llamada de revisión. Sin embargo, la cifra final de coches que serán inspeccionados se quedó en 134.951, que no deja de ser un número muy grande.

Es importante señalar, además, que los Tesla Model S y Model X son los únicos modelos involucrados en la situación, según The Verge. Entre los inconvenientes que presentaría su pantalla se encuentran, por ejemplo, la pérdida de las respuestas al tacto, cuelgues y reinicios inesperados, tiempo de encendido mayor o incluso que deje de funcionar completamente. Al ser vehículos que dependen de manera significativa de los controles desplegados en pantalla, resulta crucial que funcione correctamente.

El problema raíz está en la unidad MCU1

Como ya te contamos aquí en Hipertextual hace un más de año, el problema raíz está relacionado como la unidad MCU1. Más específicamente en su memoria NAND flash eMMC que Tesla integró en los Model S fabricados entre 2012 y 2018; así como los Model X producidos entre 2016 y 2018. Dicho componente tiene un número finito de ciclos de escritura y guardaba datos en exceso, ocasionando así fallos en cualquier proceso ligado a la pantalla táctil. Los controladores para la climatización y el acceso a la cámara de respaldo son algunos de ellos.

Quizá lo más grave de todo es el fallo que ocasiona en las luces direccionales, pues su funcionamiento igualmente depende del mencionado componente. La NHTSA indica que esto podría ocasionar un accidente si no se atiende de forma oportuna. Tesla explica que si el vehículo funciona con una actualización anterior a la 2020.48.12, y además integra las memoria eMMC defectuosas, la cámara de respaldo, la iluminación exterior y el sistema de descongelación del parabrisas podrían dejar de funcionar.

Recomiendan urgentemente actualizar a la versión 2020.48.12, si bien esto no evita que sean llamados a revisión. Esta última, por cierto, iniciará a partir del 30 de marzo. Tesla ya está avisando a los dueños por correo electrónico y, en caso de dudas, pueden realizar una llamada telefónica al centro de servicio al cliente para obtener más información.