Los responsables de WandaVision (Jac Schaeffer, 2021) nos han dejado en sus capítulos tal ensalada de referencias que, si insisten en los pendientes de estreno en Disney Plus, podría rivalizar con The Mandalorian (Jon Favreau, desde 2019) en huevos de pascua diseminados. Desde los mismos tráilers lo hemos percibido así, con pistas sobre su posible villano o acerca de quiénes están en el meollo de este follón. E incluso alguno que apunta a lo que sea que les sucede a Bruja Escarlata (Elizabeth Olsen) y Visión (Paul Bettany) en el mundo televisivo de Westview. Pero, por supuesto, hay unos cuantos más.
En el mismo inicio nos arrojan un chiste cruel hasta decir basta: Wanda Maximoff dice que Visión tiene “una cabeza indestructible”. Y todos los espectadores al día en el Universo Cinematográfico de Marvel saben que el Titán Loco (Josh Brolin) le arranca la Gema de la Mente al susodicho en Avengers: Infinity War (Joe y Anthony Russo, 2018) y le destroza así parte del cráneo sintético, acabando con su vida. O en el número de magia que los dos personajes principales durante el segundo episodio de WandaVision. Pues, en este aporte al espectáculo de talentos, se hacen llamar Glamour e Ilusión.
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Los magos Glamour e Ilusión
Los que estén familiarizados con los cómics de The Vision and the Scarlet Witch (Bill Mantlo, Steve Englehart, Rick Leonardi y Richard Howell, 1982-1986) reconocerán estos nombres. Si nuestros superhéroes constituyen una pareja artística con ellos para regocijo de su vecindario de Westview, los originales forman un matrimonio de magos. Ilya (Ilusión) y Glynis Zarkov (Glamour) residen en los mismos suburbios que nuestros protagonistas, y traban amistad. Y descubrir que sus trucos de magos no son tales, sino que poseen superpoderes que aprovechan así, los vincula aún más con lo que ocurre en el espectáculo. Y su empeño en vivir desapercibidos, con las circunstancias de WandaVision.