Netflix cerró el 2020 como su año más prolífico en todos los sentidos. El año que más series y cintas originales estrenó, el que más incremento proporcional de suscriptores logró y, quizá lo más importante aún si cabe para la sede de la compañía en Los Gatos, consiguiendo al fin empezar a vislumbrar un horizonte donde su crecimiento no pasara por endeudarse para seguir quemando dinero.

Y es que hasta ahora Netflix ha sostenido su crecimiento en base a una fórmula que para algunos analistas estaba empezando a acusar la fatiga: invertir todos los ingresos y aún más generando deuda para crear nuevo contenido que fuera alimentando su enorme rueda de captación de suscriptores. Un modelo que de momento se sostenía gracias al crecimiento de sus clientes, pero que no dejaba de ser peligroso.

Ahora, parece que Netflix no tendrá tanta prisa por reinvertir continuamente el dinero que genera y que consigue por sus inversores y por fondos que en algunos casos han levantado dudas -Bloomberg llegó a tildar algunos de fondos basura-. Según dijo el director financiero de Netflix, Spencer Neumann, durante la presentación de resultados: "Vamos a seguir invirtiendo agresivamente en las oportunidades de crecimiento que vemos y eso siempre va a ser lo primero. Pero más allá de eso, si tenemos un exceso de efectivo, lo devolveremos a los accionistas a través de un programa de recompra de acciones".

La carrera de Netflix hasta los 200 millones: juegos con el cash flow

En pocas palabras, Netflix parece que ya no necesitaría recaudar financiación externa para las operaciones diarias e incluso exploraría la posibilidad de devolver el efectivo a los accionistas. Con ello, el rey del streaming se acerca tras un año de crecimiento en bolsa y suscriptores a la consolidación y la rentabilidad, un camino que le ha costado bastante tiempo recorrer.

En su presentación de resultados de esta semana, el servicio confirmó que superó por primera vez los 200 millones de abonados de pago en el cuarto trimestre. Ha sido una larga carrera desde que superara la barrera de los 100 millones en 2017.

El año de la pandemia por excelencia

El auge de sus suscripciones este año ha estado marcado por la pandemia. El segundo trimestre, el de mayores confinamientos, impulsó sus altas en hasta 16 millones de nuevos usuarios. Sin embargo, desde Netflix se preveía que luego existiera un efecto efervescencia que causara otro número de bajas. Estaban equivocados para su beneficio. Si bien el Q3 se relajó la cifra de altas apenas superado los 3 millones, este último trimestre, las nuevas altas han vuelto a superar los 8 millones.

Eso sí, en estos datos hay un factor principal para el crecimiento del servicio: la internacionalización. En 2020 en total Netflix ha ganado 37 millones de suscriptores de los que un 83% eran de fuera de Estados Unidos y Canadá, donde parece ya haber alcanzado su pico. Un incremento que, en medio de las streaming wars, es indisoluble de su capacidad para sumar cada vez más y más contenido original, llegando incluso a abrumar.

Pero todo ese gran contenido -esas 71 películas que estrenará este año- con grandes estrellas, tiene un precio. Un precio que explicaba la rueda de las finanzas de Netflix hasta ahora.

Adiós a la necesidad de endeudarse

Las cuentas de Netflix hasta ahora podrían resumirse en que su incesante suma de usuarios y sus beneficios siempre se han reinvertido en conseguir aún más usuarios nuevos, algo que en los últimos años ha conseguido con su expansión internacional y endeudándose para generar sus contenidos propios, una vez que el estreno de Disney Plus y otros operadores apuntaran a que iban a dejar de servir contenidos de terceros poco a poco.

Así las cosas, Netflix hasta ahora se había basado para este impulso en rondas de financiación y deuda. En 2020 por ejemplo ya había acumulado una deuda de 20.000 millones. Ahora esa deuda es de 15.000 y Neumann afirmó que cuentan con 8.000 millones en efectivo para reducirla. Sería la primera vez que reducen su deuda desde 2011.

Un negocio sencillo

Netflix coge ese dinero, crea sus producciones, y consigue más suscriptores. Pero ahí se había topado con un problema. Según se ve en este análisis de Investopedia, la expansión internacional ha provocado que sus suscripciones cada vez sean menos rentables, sobre todo en países en expansión -lo que a la postre ha provocado que en muchos países como España vayan subiendo poco a poco sus precios-.

Todo esto ha provocado que hasta ahora su cash flow haya sido negativo desde 2011, hasta este año. El cash flow o flujo de caja representa la liquidez de la empresa. Explicado de forma poco técnica, lo que queda en sus cuentas restando las inversiones comprometidas, amortizaciones y otros gastos. Y este indicador se había teñido de rojo muy intenso en el caso de Netflix debido a su fórmula de reinversión continua. Parte se recupera a corto plazo -por ejemplo, aún no ha ingresado los usuarios que están usando su periodo gratuito en los países en los que aún ofrece esta fórmula- pero otros son más a largo plazo. En 2019 su cash-flow acabó con -3.274 millones de dólares, lo que hizo que la empresa de forma pública se propusiera recortarlo.

El 2021 y la competencia marcará si se ralentiza el ritmo

Ahora, por primera vez, ese flujo de caja ha sido positivo durante 2020, aunque en el último trimestre volvió a ser negativo como se esperaba. En datos globales, el flujo de caja libre para todo el año 2020 fue de +1.900 millones de dólares, frente a los -3.300 millones de dólares de 2019. Una diferencia abrumadora que parece que podría afianzarse en 2021.

¿Por qué? Aunque la pandemia y el cese de los rodajes -y por lo tanto el gasto- ha podido tener algo que ver, lo cierto es que parece que Netflix ha superado sus propias expectativas. "Para ser claros, quiero decir que habríamos tenido un flujo de caja positivo sin los recientes eventos de la COVID", señaló Neumann hace ya tres trimestres.

Este cambio de tendencia pone el broche de oro a un año récord para la empresa, gracias a la pandemia de la COVID-19 o no, algo que se tendrá que ver a medio plazo. Netflix pronosticó otros 6 millones de nuevos suscriptores para el primer trimestre de 2021. Pero está claro que el crecimiento sin precedentes que se produjo en los primeros días de la pandemia se ha ralentizado.