La ansiada vacuna por fin comienza a materializarse como una realidad después de que ciertos países, como Reino Unido, compren las primeras dosis. Europa, en cambio, lo hará a partir del 29 de diciembre, cuando dará luz verde para la administración de la de Pfizer. Más tarde, el 12 de enero, llegará el turno de la de Pfizer. Será ese mes cuando, según ha anunciado el Gobierno de España, comenzará la vacunación dentro de nuestras fronteras. ¿Pero cuál es la opinión de los españoles sobre la vacuna?
El pasado mes de septiembre, cuando la vacunación se veía aún más lejos en el horizonte, una primera ronda de encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) indicaba que un 40% de los españoles no se pondría la vacuna. Más tarde, la compañía experta en opinión pública Ipsos, junto al Foro Económico Mundial, realizó otra investigación a nivel europeo, en la que España quedaba la segunda por la cola en intención de vacunación. Los menos dispuestos eran los franceses, con solo un 54% de personas a favor de ponerse la vacuna cuanto antes, siendo esta la opinión de un 64% de españoles. Ahora, una segunda ronda del CIS señala que la llegada del día en que las primeras personas puedan recibir la ansiada vacuna no ha cambiado demasiado los resultados, pues un 55% de los encuestados prefiere esperar a ver cómo funciona antes de que se les administre a ellos.
Así es la opinión de los españoles sobre la vacuna
En total, para esta encuesta acerca de la opinión de los españoles sobre la vacuna se han realizado 2.131 entrevistas, distribuidas en 872 municipios de 50 provincias.
El porcentaje de encuestados que no se vacunaría en ningún caso es relativamente bajo, del 8’4%. Sin embargo, es mucho mayor el de personas que prefieren esperar, concretamente de un 55,2%. Solo un 32,5% se pondría la vacuna en cuanto pudiera.
La cifra sube ligeramente en caso de que fuese por recomendación directa del médico o de un familiar cercano, pero solo hasta un 59,6%.
Para que se alcance la conocida como inmunidad de rebaño debe haber inmunizadas al menos un 70% de personas. El coste que esto tendría en número de vidas si se dejase al virus encargarse de inmunizar a la población sería muy limitado. Por eso, la vacuna es nuestra única opción para que las cifras de fallecidos bajen y poco a poco veamos cómo esta pesadilla se diluye. Algunas personas prefieren esperar para eso. Pero desgraciadamente el coronavirus no espera. No necesitamos encuestas para saberlo, llevamos viéndolo desde el pasado mes de marzo.