La carrera por la conquista del espacio se ha reavivado. Tiempo atrás, el acceso al cosmos estaba limitado a actores estatales de un reducido número de países. Sin embargo, con el paso de los años, se han sumado nuevos protagonistas privados como SpaceX, con sus cohetes reutilizables y Virgin Galactic, con su avión espacial. Ahora, llega Aevum, un nuevo jugador que busca poner satélites en órbita con el Ravn X, y en tan solo 180 minutos. ¿Lograrán lo que prometen?

Llevar carga al espacio es una tarea compleja y costosa. Con el objetivo de reducir los presupuestos y facilitar el acceso a la órbita, se han desarrollado diferentes propuestas, algunas más exitosas que otras. La compañía estadounidense Aevum ha presentado el Ravn X, un drone autónomo que cuenta con la capacidad de transportar satélites pequeños hasta una órbita baja. Esto podría resultar muy atractivo para los clientes a los que esperar un lanzamiento de SpaceX les queda muy lejos o inalcanzable.

El lanzamiento de satélites con el Ravn X podría ser muy diferente al de los cohetes convencionales. Para despegar solo necesita una pista de kilómetro y medio. Además, funciona con el mismo tipo de combustible del que se alimentan los aviones a reacción, un hidrocarburo de fácil acceso en cualquier parte. Desde Aevum aseguran que estas características dotan al drone autónomo con la capacidad de operar en casi todos los aeropuertos habilitados del mundo, tanto para el despegue como para el aterrizaje.

El Aevum Ravn X no necesita piloto

Aevum Ravn X
Aevum

Como recoge TechCrunch, se trata de un avión autónomo de 25 metros de largo y 18 metros de ancho, con un peso de unos 25.000 kilogramos, incluyendo la carga útil. A diferencia de los cohetes, despega de forma horizontal y no se ve afectado por las condiciones climáticas. El aparato cuenta con dos etapas. Cuando alcanza a la altitud necesaria, en una segunda etapa se desprende del Ravn X para terminar el trayecto y poner el satélite en órbita.

Si bien la idea de lanzar satélites desde aviones no es nueva y existen otras propuestas en marcha, desde Aevum buscan convertirse en una alternativa viable. Aseguran que, tras un vuelo orbital, se podría recuperar el 70% del sistema. Aunque esperan que, con el tiempo, ese porcentaje se eleve hasta el 95%. Además, han mencionado que ya cuentan con abultados contratos con la Fuerza Espacial de los Estados Unidos.