El personal sanitario es uno de los grupos de más expuestos a la COVID-19. Incluso se considera que los odontólogos están en riesgo, ya que la trasmisión es mediante la saliva y los aerosoles. Al no poder mantener la distancia física con sus pacientes, es más fácil que este colectivo se contagie. Eso es lo que dice la lógica, ¿no?
Eso se ha pensado hasta ahora que un nuevo informe, publicado en la revista The Journal of the American Dental Association, apunta a que solo un 1% de los dentistas de Estados Unidos se han contagiado de COVID-19. "Esta es una muy buena noticia para dentistas y pacientes", comenta en un comunicado de prensa el director ejecutivo del Instituto de Investigación y Ciencia de la Asociación Dental Americana (ADA), Marcelo Araujo.
"Esto significa que lo que están haciendo los dentistas, el control de infecciones y una mayor atención a la seguridad del paciente y del equipo dental, está funcionando".
El informe ha sido realizado por investigadores del Instituto de Ciencia e Investigación de la ADA y del Instituto de Políticas de Salud con sede en Chicago. Y el doctor Araujo es el autor principal del informe. Además, continúan recopilando datos. Por el momento, en este primer informe han participado 2.200 dentistas.
De los encuestados, solo el 16,6% se habían hecho la prueba de COVID-19. Los casos positivos no estaban en ninguna región concreta sino a que estaban a lo largo del país.
Entre los odontólogos que no habían sido evaluados por COVID-19, tan solo el 0,32% había presentado síntomas que darían pie a un diagnóstico probable de coronavirus por un médico, señala la nota de prensa.
Comprender los riesgos de la profesión
Estos datos, ponderados, dan un 0,9% de dentistas estadounidenses que podrían haber pasado la enfermedad. Por lo que, muy pocos de ellos, han pasado la enfermedad. Es importante teniendo en cuenta las circunstancias, ya que sería lógico pensar que una profesión que necesita del acercamiento físico y la manipulación de la boca tuviera un porcentaje mucho mayor de enfermos.
Para Araujo este informe es importante ya que da nueva información sobre los riesgos de los dentistas respecto al COVID-19. Un riesgo al que se exponen tanto los profesionales como por los pacientes. "Comprender los riesgos asociados con la transmisión de COVID-19 en el entorno dental es fundamental para mejorar la seguridad del paciente y del equipo dental", explica el doctor Araujo.
"Este estudio nos da otro paso adelante en la comprensión de lo que funciona. Los dentistas siguen las pautas de la ADA y de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos. Y esto ayuda a mantener al equipo dental y a sus pacientes lo más seguros posible".
Medidas COVID-19 en el dentista
Aunque no se sabe con exactitud qué ha hecho que la tasa entre dentistas sea tan baja, sí sabemos qué medidas contra el COVID-19 están aplicando. Por recomendación de ADA, se han puesto una serie de medidas tanto para los pacientes como para los dentistas para evitar el contagio.
El personal sanitario de la consulta debe llevar mascarillas quirúrgicas o N95, también usar protectores faciales completos o gafas protectoras para tener una mayor seguridad. A nivel higiénico, ADA recomienda que haya gel hidroalcohólico a mano de todo el mundo, tanto pacientes como personal, además de que las superficies se limpien con regularidad.
Se recomienda la distancia física entre el personal de la consulta y los pacientes. También facilitar que los pacientes puedan mantener entre ellos la distancia. Esto se puede hacer de varias formas, desde poner citas más espaciadas hasta pedir que esperen su turno en el coche. ADA también recomienda quitar todo lo que se pueda tocar (juguetes, revistas, etc) de la sala de espera. Además, si es posible, se les recomienda ir solos a la consulta.
Antes de la cita programada, el personal llama para preguntar por el estado de salud del paciente y si tiene síntomas, se le pospone la cita. Además, se les recomienda ir con mascarillas y se les toma la temperatura en la entrada.
Dentistas y COVID-19 en España
¿Cuáles son las medidas recomendadas en España entre los odontólogos? Además de las medidas generales de la pandemia (mantener la distancia social o usar gel hidroalcohólico siempre que uno no pueda lavarse las manos con agua y jabón), el Consejo General de Dentistas de España también ha hecho una serie de recomendaciones ante la COVID-19 para sus colegiados.
Los odontólogos ya utilizan mascarillas. Pero para evitar los aerosoles, los dentistas españoles toman una serie de medidas para cuidarse y para cuidarnos. Por ejemplo, para evitar la carga viral hacen al paciente enjuagarse con "un colutorio antiséptico" antes de realizar cualquier manipulación de la boca. También se recomienda el "aislamiento absoluto" de la boca, mediante el "dique de goma". Otras medidas para dispersar o eliminar los aerosoles son la "aspiración de alta potencia" y ventilar adecuadamente el área clínica.
No obstante, esto no queda así, ya que hablan de la necesidad de enmarcar estas medidas especiales dentro de un protocolo COVID-19 que incluya "la selección previa de los pacientes (triaje), la identificación de posibles casos, la elección del plan de tratamiento, la minimización del riesgo, la adecuada protección, la racionalización de las actividades recomendables y el correcto tratamiento de desinfección y esterilización", apuntan desde el Consejo de Dentistas.
En Estados Unidos los dentistas están pudiendo esquivar el virus. Y en España todas las medidas son para evitar el contagio en consulta y probablemente se pueda hacer. Sobre todo si, tanto paciente como sanitario, respetan las normas y las recomendaciones hechas por las autoridades. En definitiva, sí, es posible tener la boca bien en tiempos de COVID-19.