Philips Hue es una de las marcas más conocidas de iluminación inteligente. En primer lugar por se compatible con todos los asistentes de voz e integrable en la mayoría de servicios de domótica y en segundo lugar, por el abanico de personalización que ofrece y la variedad de dispositivos compatibles, además de ofrecer la posibilidad de integrar luces de terceros en su plataforma.

Ahora la compañía, aprovechando la IFA virtual, ha sacado una nueva tira LED que supone un paso adelante en iluminación ambiental, enfocada a ser colocada detrás de la televisión, para generar iluminación ambiental directa, de forma que la experiencia de visualización sea mucho más rica.

Philips Hue Play Gradient Lightstrip, permite cambiar el color de la iluminación por sectores, generando mezcla de colores y gradientes con un aspecto visual muy efectista, a diferencia de la tira LED clásica de Philips o de otros fabricantes que solo permite mostrar un color a la vez a lo largo de toda la luminaria.

Philips Hue Play Gradient Lightstrip para colocar tras la TV

Además, puede utilizarse para sincronizar automáticamente el color y la temperatura de la luz con lo que muestra la televisión, como el resto de la gama Play de Hue o similar a la tecnología Ambilight que integran los televisores de la compañía. Eso sí, como el resto de opciones disponibles de Philips Hue Play para la TV, necesita que el usuario tenga la Philips Hue Play HDMI Sync Box, un aparato que permite la sincronización entre la luces y la TV a través del puerto HDMI y que lleva ya un tiempo en el mercado.

La idea de Philips con la Hue Play Gradient Lightstrip es precisamente colocarla detrás de la televisión, por lo que a diferencia de otras tiras LED, no se vende en metros, sino en longitudes para que encajen con las TVs en función de su tamaño, ofreciendo versiones de 55 pulgadas, 65 pulgadas y 75 pulgadas.

En cuanto a la disponibilidad, llegará partir del 16 de octubre de 2020 y no será precisamente barata: la versión de 55 pulgadas tiene un precio de 199 dólares, la de 65 pulgadas de 219 dólares y la versión de 75 pulgadas sube hasta los 240 dólares, más de doble de lo que cuesta el modelo actual sin gradientes.