Hay películas que perduran en el tiempo por su historia, por sus personajes, por su guión y/o por sus efectos especiales. Las hay que recordamos por escenas míticas en las que la cámara logra planos mágicos e imposibles, apenas imperceptibles pero que logran impactar en quien lo ve. La magia del cine, dicen. Y en esa magia hay mucha tecnología.

De ejemplos hay muchos. El cine en sí parte de una tecnología en sí misma. Con el tiempo fue mejorando a través de la grabación de sonido, el cine en color, el cinemascope, el Dolby Surround, la alta definición… Y qué decir de tecnologías como el croma, imprescindible en prácticamente cualquier película donde haya que cambiar algo en postproducción. O el bullet time que popularizaron las hermanas Wachowski y que permite ralentizar la acción en pantalla y mover la cámara en distintos ángulos.

La lista de tecnología implicada en el cine es tal que la propia Academia de los premios Oscar realiza cada año un evento paralelo. En él premia y agradece el servicio de toda clase de profesionales que han influido en el cine con inventos relacionados con efectos especiales, cómo se graba la imagen y el sonido o cómo se monta el metraje.

Uno de esos inventos se llama chestcam o SnorriCam. Su nombre comercial se debe a sus creadores, los hermanos Snorri. Su concepto se empleó en cine desde los años 60 con títulos como Psicosis (1960) o Mean Streets (1973). Pero este invento como tal no llegó a materializarse hasta finales de los 90, cuando el director de cine Darren Aronofsky la popularizó en sus películas de culto Pi (1998) y Requiem por un sueño (2000).

Dos hermanos que no son tal

Los padres de la conocida como SnorriCam, chestcam o bodymount se llaman Einar y Eidur Snorri. Ambos son islandeses. Ambos fotógrafos y cineastas. Pero aunque se hacen llamar los Hermanos Snorri o Snorri Brothers, en realidad no son hermanos, tal y como cuentan en su página oficial, donde comercializan sus servicios y su cámara.

Al parecer se conocieron en una competición de breakdance en su país natal en 1985. Su amistad les llevó a trabajar juntos en proyectos de fotografía. Primero en Islandia y luego en Estados Unidos, donde llegaron en 1995. Sus trabajos llegaron a publicarse en medios como Rolling Stone y a codearse con artistas como Green Day, Soundgarden, su compatriota Björk o DJ Shadow.

SnorriCam Oficial

Pero su momento cumbre llegó con la invención de la SnorriCam. Qué mejor nombre si la habían creado ellos. El propósito de esta cámara es encuadrar al personaje en el centro de la escena ofreciendo un primer plano subjetivo pero visto desde fuera del personaje. Además, el efecto logrado es impresionante, ya que mientras el actor aparece estabilizado, el escenario se mueve a medida que el personaje camina, corre o realiza cualquier acción. La SnorriCam consta de la cámara en sí, un brazo extensible y un arnés que va colocado en el propio actor.

Según cuentan en su página oficial, los hermanos Snorri diseñaron esta cámara a mitad de los 90 del siglo pasado. El motivo fue grabar un vídeo musical de bajo presupuesto de una banda punk de chicas. Un conocido, Eric Watson, vio potencial en esa cámara o artilugio y decidió mostrársela a Darren Aronofsky, hoy mundialmente conocido por títulos como Mother! (2017), Black Swan (2010) o El luchador (2008).

YouTube video

En aquel momento, sin embargo, solamente había grabado varios cortometrajes y se disponía a rodar su primer largo, el título de culto Pi (1998) y que no hubiera sido la misma película sin el uso de la SnorriCam. El resultado fue tan positivo que Aronofsky no dudó en emplear el artilugio en su segunda película, Requiem por un sueño (2000).

Con los años, lo que conocemos como chestcam, bodycam o bodymount ha ido perfeccionándose. Para empezar, la cámara empleada ha ido menguando en tamaño y mejorando en calidad. El brazo extensible también ha sufrido cambios, con varios modelos cada vez más ligeros. Por otro lado, el arnés ha incorporado mejoras como batería, unidad grabadora y/o una pantalla para que se pueda ver lo que se está grabando.

Y aunque existen alternativas como las cámaras GoPro y similares, todavía se siguen usando las cámaras y los prototipos de los Hermanos Snorri. Tanto en cine como en videoclips musicales, publicidad o en vídeos deportivos. Es más, desde la propia página oficial de SnorriCam puedes consultar diferentes lugares del mundo donde puedes alquilar una cámara de este tipo para tus propios proyectos audiovisuales.

Los antecedentes de la SnorriCam

Que no exista una tecnología no implica que no se intente obtener el mismo resultado con lo que se tiene en ese momento. En el caso de la SnorriCam o chestcam, no es hasta la segunda mitad de los años 90 en que se populariza su uso.

Además de las dos primeras películas de Darren Aronofsky, podemos ver planos obtenidos mediante SnorriCam en películas comerciales como Armageddon (1998) o en la primera gran película de Guy Ritchie, Lock, Stock and Two Smoking Barrels (1998). Pero ya hablaremos de las repercusiones de esta cámara en el cine de finales del siglo XX y de principios del XXI.

Psicosis Estilo SnorriCam

El caso es que podemos encontrar ejemplos de planos similares a los que obtenemos con una bodycam décadas antes de su invención. En el clásico Psicosis (1960) hay pequeños amagos que recuerdan a la SnorriCam. También ocurre con el título Seconds (1966) o Mean Streets (1973). Sin embargo, tendremos que esperar a cámaras más ligeras, entre comillas, tipo Steadicam. A partir de 1976 permitirán mover con más soltura la cámara y obtener planos más arriesgados como ocurre en Malcom X (1992) de Spike Lee o en Bound (1996) de las hermanas Wachowski.

Pero no será hasta la llegada de la SnorriCam que podremos ver planos subjetivos como los que se pueden obtener con este artilugio. Su popularidad será tal que veremos incluso escenas parodia en títulos como Rock’n’Rolla (2008) de Guy Ritchie o en la comedia The Hangover (2009). En ambas películas, en vez de obtener un plano de vértigo o asfixiante se consigue el resultado contrario, la comedia.

La influencia de la SnorriCam en el cine

Aunque la popularidad de la chestcam o SnorriCam ha decaído en el cine, ante alternativas más baratas e ingeniosas como las cámaras tipo GoPro o los teléfonos móviles con cámaras en alta resolución, el momento de gloria de las cámaras tipo bodymount en Hollywood se produjo especialmente durante la primera década del siglo XXI.

Desde su descubrimiento por parte de Aronofsky en sus dos películas de 1998 y 2000, directores como Guy Ritchie o Spike Lee han empleado esta técnica y este tipo de cámara para sus películas. Ritchie, por ejemplo, la utiliza tanto en su primera película de 1998 como en títulos posteriores como Revolver (2005) o Rock’n’Rolla (2008), ya mencionada antes. Spike Lee la emplea en 25th Hour (2002), titulada La hora 25 en Hispanoamérica y La última noche en España, y también la utiliza en Inside Man (2006), titulada El plan perfecto en Hispanoamérica y Plan oculto en España.

Pero hay más directores que apostaron por la SnorriCam, como el inglés Danny Boyle, que la aprovecha en títulos como La playa (2000), 28 días después (2002) o Slumdog Millionaire (2008). Incluso el español Álex de la Iglesia la aplicará en Crimen ferpecto (2004) y el mexicano Alejandro González Iñárritu en Babel (2006). También el español Juan Carlos Fresnadillo la usará en 28 semanas después (2007).

Otros nombres conocidos que han empleado la SnorriCam o bodycam en algunas de sus películas son Peter Jackson con The Lovely Bones (2009), Neill Blomkamp con District 9 (2009) o Kevin Smith con Red State (2011).

Como decía antes, su uso ha decaído en el cine pero todavía pueden verse anuncios, videoclips o vídeos de YouTube en los que la SnorriCam tiene mucho que ver con los resultados. Precisamente, en la página oficial de esta cámara hay varios ejemplos en Instagram de amateurs y profesionales que la aprovechan para sacar partido a sus historias.