México está dispuesta a promover la reubicación en el territorio de parte de las grandes fábricas de producción de Apple en Asia. Así lo ha revelado la Secretaria de Economía Graciela Márquez, en el marco de conversaciones sobre el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para favorecer el comercio de estos países.
Lo recoge Reuters tras una entrevista con Márquez, donde la Secretaria hacía hincapié en las capacidades industriales de México. En este sentido, se busca reforzar, muy especialmente, la inversión en el territorio para la fabricación de acero destinado al sector automovilístico.
En este sentido, el presidente Andrés Manuel López Obrador habría mantenido conversaciones con varias firmas extranjeras con el fin de plantear propuestas de inversión o producción localizadas en México.
También Apple
La industria del automóvil no es el único foco en el que se tiene puesta la atención, sin embargo. La Secretaria mexicana revelaba, al mismo tiempo, que desde el Gobierno se buscará hablar con Apple y otras compañías estadounidenses para que consideren ubicar parte de sus plantas de producción situadas en Asia en terreno local.
La tentativa se produce en el marco de tensiones comerciales que lleva tiempo teniendo lugar entre China y Estados Unidos. Esta situación, a la que se suman los actos de la Administración Trump contra Huawei, ha obligado a numerosas firmas a plantear la reubicación de sus plantas de producción en otros países del continente asiático por miedo a posibles represalias o aranceles que el Gobierno chino pudiera instaurar a los fabricantes estadounidenses.
México busca sacar partido de ello y obtener, por el camino, contratos de fabricación en el país. A su favor cuentan con el indudable hecho de la proximidad con Estados Unidos y con la propia sede de Apple, por ejemplo, que se encuentra en Cupertino, California.
Empresas norteamericanas y europeas que actualmente fabrican sus productos en China, Vietnam y Singapur se encontrarían entre los actuales objetivos mexicanos. "Estos teléfonos no tienen por qué ser producidos en China", aseguraba Márquez al citado medio. Al mismo tiempo, la política expresaba la existencia de "una enorme oportunidad" de hacer lo propio en México.