Los ministerio de Sanidad y de Ciencia e Innovación dan por finalizado el estudio de seroprevalencia en España. Ahora se confirman los datos ya explicados en las dos ruedas de prensa anteriores. Solo el 5% de la población que vive en España ha pasado la COVID-19, según el estudio de seroprevalencia ENE-COVID-19.
En la presentación han participado las doctoras Raquel Yotti, directora del Instituto de Salud Carlos III, y Marina Pollán, directora del Centro Nacional de Epidemiología. Además, han informado que los resultado de la primera oleada se han publicado este mismo lunes en una de las revistas científicas más prestigiosas, The Lancet.
El estudio ha sido diseñado y coordinado por el Instituto de Salud Carlos III e incluye la participación del Instituto Nacional de Estadística (INE), que se encargó de escoger quién iba a participar, asegurando rangos de edad diferentes y que hubiera representación de todas las comunidades autónomas y provincias.
La idea de esta investigación era saber cuántas personas han pasado la COVID-19 en toda España. Y, por tanto, si tienen anticuerpos. Además, estos datos sí que son representativos de toda la sociedad gracias a la participación del INE, se puede calcular el porcentaje real de letalidad de la enfermedad. En cambio no sucede lo mismo con el realizado por el ayuntamiento de Torrejón de Ardoz (Madrid), por ejemplo.
Aunque la media es de una prevalencia del 5%, en algunas zonas ha sido mayor, como en la Comunidad de Madrid, con un 11,7%, o en Castilla-La Mancha. En cambio, otras como Andalucía están por debajo de esa tasa media. "Algunas provincias se sitúan en un 2-3%, mientras que otras superan al 10%, registrándose los porcentajes más altos en la zona centro de la península. El porcentaje también es mayor en los núcleos de población con más de 100.000 habitantes en comparación con municipios con menor población (6% y 4%, respectivamente)", apuntan desde el Instituto de Salud Carlos III.
Fortalezas del estudio de seroprevalencia
La doctora Yotti ha apuntado que a nivel nacional e internacional se han destacado los "puntos fuertes" de este estudio. Esas fortalezas del estudio de seroprevalencia son cinco. En primer lugar, la representatividad. No solo a nivel nacional sino incluso a nivel provincial, tal y como explica Yotti. De esta forma, se pueden extrapolar mejor los datos a todo el país. "Y permite dar datos más relevantes", afirma.
En segundo lugar, "la altísima tasa de participación le da rigor al estudio", indica la directora del Instituto de Salud Carlos III.
Además, "permite calcular los niveles de anticuerpos en rangos de edad muy diferentes". Han participado desde bebés de meses hasta personas mayores, permitiendo que las muestras fueran lo más amplias posibles y, así, conocer mejor cómo ha incidido la COVID-19 en cada edad.
En cuarto lugar, el hecho de que se haya usado dos tipos de pruebas, los "test de anticuerpos y el estudio de laboratorio con medidas más precisas".
La quinta fortaleza, según Yotti, es que "la información epidemiológica adicional que aportan elementos para preparar medidas" de cara a las decisiones futuras respecto a esta pandemia.
¿Qué pasa con la inmunidad de la COVID-19?
Esta estudio también ha ayudado a saber un poco más sobre los anticuerpos. Entre la primera y la segunda ronda del estudio de seroprevalencia hubo un 7% de las personas que pasaron de tener anticuerpos a que no se pudieran encontrar Mientras que entre la segunda y la tercera oleada ha subido hasta el 14%. Pollán apunta a que se ha trabajado con las mejores pruebas rápidas del mercado, pero que la sensibilidad aún no está desarrollada del todo. "No podemos decir que no haya inmunidad. En otras enfermedades, como al Hepatitis, sabemos que los anticuerpos desaparecen, pero no las células que lo crean. Tienen memoria. Y esto es lo que podría pasar con el coronavirus", indica la doctora Pollán.
Además, "no estamos viendo reinfecciones" ni en España ni en la literatura que se está presentando a nivel internacional, ha comentado Yotti. Es más, "tener anticuerpos no implica tener una inmunidad total ni sabemos cuánto tiempo dura". De hecho, "sabemos por otros coronavirus" que la inmunidad puede ser incompleta o transitoria. Por eso, Yotti pide "prudencia" a todas las personas que han pasado la COVID-19. "Hay que seguir protegiéndose y protegiendo a los demás", concluye.
También han mirado lo contrario. Es decir, las personas que al principio no presentaban anticuerpos y en la segunda y tercera oleada sí. De la primera a la segunda ronda, hubo un 0,9% más de personas con anticuerpos. Mientras que entre la segunda y la tercera, han pasado de no tener anticuerpos a presentarlos un 0,7% de los pacientes. Esto parece deberse, según indican los expertos, al confinamiento.
No obstante, desde que empezó a producirse la desescalada en toda España, las personas con tres o más síntomas de COVID-19 en los 15 días previos a su participación en el estudio de seroprevalencia también han variado en el tiempo. En la primera ronda fueron un 4% de personas las que refirieron síntomas en los días previos mientras que en la segunda ronda, "debido al confinamiento", solo un 0,4%. Sin embargo, en esta última ronda "ha habido un repunte hasta el 1,4%, probablemente debido a la movilidad". Aunque, señala Yotti, "en ningún caso se trata de un diagnóstico, hablamos de síntomas compatibles con la COVID-19". Pero, como los anticuerpos tardan en aparecer entre una y dos semanas, no se puede confirmar que estas personas se hayan contagiado.
Agradecimientos a la "generosidad" de los participantes
Tanto Yotti como Pollán han agradecido en varias ocasiones la "generosidad" de los participantes del estudio de seroprevalencia. Tanto de los ciudadanos y familias seleccionados por el INE para participar, como de todas las personas que han estado detrás. Preparando el estudio, cogiendo muestras y coordinando todo para que el estudio sea lo más "rigoroso" posible.
De las personas seleccionadas por el INE, el 77% han participado en las tres oleadas del estudio. Es decir, 68.296 personas han ido al menos en tres ocasiones a que se les hiciera un test rápido de anticuerpos. Por lo que hay una adhesión al estudio del 88%. Además, de todas las personas que han participado en las tres rondas, el 91% de ellas han aportado, además, al menos una muestra de sangre para realizar un estudio más completo. "En total, se han realizado 186.908 test rápidos (más 9.755 en el estudio específico insular) y se han recogido 165.176 muestras de sangre (más 9.130 adicionales en el estudio específico insular)", indica el Instituto de Salud Carlos III.
"Con este estudio hemos visto la generosidad y compromiso de los ciudadanos y las fqamilias españolas", concluye la doctora Yotti.