La producción del icónico Boeing 747, conocido como jumbo, ya tiene fecha de caducidad. El medio estadounidense Bloomberg asegura, citando a fuentes cercanas a la compañía, que el último 747 saldrá de la factoría que la compañía tiene en Seattle en unos dos años.

Boeing, por el momento, no ha comunicado oficialmente esta decisión. No obstante, el medio norteamericano señala que el fabricante ha retirado de sus resultados financieros cualquier referencia relacionada con "evaluar la viabilidad" de este programa.

El fin del Boeing 747 es histórico

Boeing 747
Boeing 747-8 de Lufthansa

El fin de la producción del Boeing 747 será un momento histórico para la industria de la aviación. La aeronave, conocida popularmente como "la reina de los cielos", comenzó a operar en el año 1968. Sumando todas las versiones, Boeing ha fabricado más de 1.500 unidades del 747 a lo largo de estas cinco décadas. Hasta el año 2007, cuando el A380 de Airbus entró en activo, el modelo de Boeing era el avión de pasajeros con mayor capacidad del mundo.

En la actualidad, el fabricante estadounidense tiene un total de 15 aviones 747 pendientes de producción. Según recoge Bloomberg, 12 de ellos acabarán en manos de UPS, la empresa de transportes, que utiliza estas aeronaves para transportar mercancías entre países.

En los últimos años, las aerolíneas han mostrado un mayor interés por aviones de menor tamaño, más eficientes energéticamente pero capaces de cubrir largas distancias. Esta es una de las razones por las que Airbus se vio obligada a finalizar prematuramente la producción del A380, el avión de pasajeros más grande del mundo. La tendencia de la industria también afecta al Boeing 747, cuyo lugar será reemplazado por otros modelos del fabricante norteamericano.

Otro factor de peso ha sido la expansión del coronavirus (COVID-19), que ha desplomado las cuentas de todas las empresas del sector, incluyendo las aerolíneas.

Con el Airbus A380 y el Boeing 747 fuera de las líneas de producción, llega a su fin la era de los aviones comerciales de gran capacidad equipados con múltiples plantas. Las unidades entregadas a las aerolíneas continuarán volando durante los próximos años, pero su presencia en los cielos será cada vez más anecdótica.