Un ex-empleado de Intel asegura que los problemas de los procesadores Skylake fue la gota que colmó el vaso y terminó de convencer a Apple a abandonar Intel y empezar a fabricar sus propios procesadores para los Macs.
Durante la keynote virtual de la WWDC, Tim Cook anunció que Apple empezaría a fabricar sus propios procesadores para los Macs, al igual que sucede con los iPhones, iPads, Apple Watch, Apple TV y HomePod.
La posibilidad de tener un control total sobre los componentes de los Macs ha sido una necesidad cada vez mayor para la compañía. A medida que Apple diseñaba productos más livianos y delgados, fue cada vez más complicado mantener los procesadores fríos y el desempeño alto.
Esto no ha sido nunca un problema para Apple con procesadores propios basados en arquitectura ARM en otros de sus dispositivos.
Problemas en el control de calidad de Skylake
En una entrevista hecha por PC Gamer, François Piednoël, ex-ingeniero de Intel, explicó la complicada situación durante el desarrollo de los la generación Skylake de microprocesadores:
El control de calidad de Skylake fue más que un problema. Era anormalmente malo. Nuestros compañeros en Apple eran los que más tickets de fallos en la arquitectura y la situación se puso muy, muy mala.
Cuando tus clientes empiezan a encontrar tantos fallos como tu, no estás dirigiéndote al lugar correcto.
Para mí esto fue el punto de inflexión. Es cuando Apple, que llevaban tiempo contemplando la posibilidad de hacer la migración, vieron la situación y dijeron: "bueno, creo que es hora de hacerlo". En definitiva, el pésimo control de calidad de Skylake fue el detonante para que dejen la plataforma.
Los rumores de que Apple abandonaría Intel para sus Macs y empezaría a fabricar sus propios procesadores tienen un par de años. El proceso de migración es similar al que ocurrió de PowerPC a Intel anunciado en 2005.
Según Ming-Chi Kuo, una de las primeras productos con la nueva arquitectura ARM será un iMac rediseñado que se lanzará antes eu acabe el año.