Ante la escasez de recursos médicos y una curva de afectados por el coronavirus que sigue creciendo a la espera de que el confinamiento se haga notar, los ingenieros y especialistas en fabricación por impresión 3D no pierden el aliento.
Y es que según han anunciado el Consorci de la Zona Franca de Barcelona –CZFB–, el Consorci Sanitari de Terrasa y el hospital Parc Taulí de Sabadell junto a otras empresas como HP o Seat, así como al Servei Català de Salut, han desarrollado el primer respirador mecánico de campaña con capacidad de ser industrializable. Esto es, que permite su fabricación en cadena y en volumen.
Dentro del movimiento ‘maker’ que desarrolla respiradores y máscaras ‘from scratch’ en España
Según los primeros datos, esperan producir entre 50 y 100 unidades al día durante esta próxima misma semana. Esta capacidad de producción sería crucial durante este primer repunte de casos. Según recoge el diario La Vanguardia, desde el CZFB afirman que "la capacidad de producir esto industrialmente es muy importante en estos momentos".
Manel Balcells, del centro tecnológico Leitat, afirma que esta herramienta "puede salvar vidas":
"Llega en un momento crítico por la gran demanda de respiradores cuando el mercado tradicional no alcanza. Es de campaña, simple, pero que permite intubar durante tres o cuatro días".
Este primer diseño, que ha sido ideado con la robustez, utilidad y simplicidad en mente, de tal forma que faciliten su fabricación, se apoya en una incubadora de empresas especializadas en torno a la impresión 3D.
Este proyecto aúna la colaboración publico-privada, a la que se han sumado nombres del peso de Airbus y Navantia. Será respaldado por la comunidad maker con disponibilidad de equipos de impresión 3D, sobre los que podrá recaer parte de la producción de algunas piezas con la idea de aumentar la producción.
Asimismo, animan a otros fabricantes a que se sumen al proyecto para aumentar la velocidad a la que se fabrican estos equipos. "Pensamos que podemos sumar a otras empresas para ampliar la capacidad de producción. Creemos que podemos solucionar buena parte del problema", apuntan fuentes del consorcio CZFB.
La impresión 3D, el gran aliado en durante la crisis del coronavirus
Se suma así a los diseños puramente altruistas que intentan dar respuesta a la altísima y repentina demanda de uno de los instrumentos que se demuestra más eficaces en la lucha contra el COVID-19.
Y es que si bien únicamente entre un 5 y un 10 % de los casos de coronavirus evolucionan de forma que necesiten esta asistencia respiratoria, el alto número de positivos hace que se convierta en un bien tremendamente escaso. El pasado fin de semana, el Presidente del Gobierno anunciaba la compra urgente de 700 respiradores adicionales.
Si bien la calidad de estos respiradores fabricados rápidamente no será la más alta, se espera que sea suficiente para tratar a los casos más simples. Se permitiría así que los modelos más potentes sean utilizados en los casos que más lo necesiten.
Este mismo lunes, el ministro de sanidad de España, Salvador Illa, se ha pronunciado acerca de los respiradores diseñados ad hoc para esta crisis. Afirma Illa que se procederá a su homologación, para dar el visto bueno a la producción y que puedan ser utilizados en los pacientes a lo largo del país.