China siempre se ha distinguido por el férreo control que ejerce sobre sus habitantes. Desde el Gran Cortafuegos que censura el internet, hasta el uso de reconocimiento facial para identificar y rastrear a individuos, el gobierno siempre ha hecho lo posible por anticiparse a cualquier cosa. Tal vez por eso no suena extraño las medidas que está tomando para contener el brote de coronavirus que ha infectado a cerca de 80.000 personas en ese país.

De acuerdo con información de diarios locales (vía *Abacus News, algunas provincias han comenzado a usar sellos electrónicos en las puertas de casas en zonas de cuarentena. Los dispositivos se encuentran instalados en ciudades como Zhengzhou, Ningbo y Tianjin, en donde las autoridades no tienen suficiente personal para revisar manualmente a más de 100 residentes en cuarentena.

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China Unicom, uno de los fabricantes de estos sellos, dice que el aislamiento en el hogar es una medida importante para frenar la transmisión del virus. El dispositivo se describe como una "puerta inteligente magnética" que opera usando el internet de las cosas. Una vez que la puerta se abre, el sistema enviará una alerta al centro de monitoreo y a una aplicación móvil. La empresa dice que la implementación efectiva del aislamiento epidémico en el hogar, ha ahorrado una gran cantidad de recursos humanos.

Los sellos electrónicos alertan a las autoridades cuando se abre la puerta

En el distrito de Erqi, en la ciudad de Zhengzhou, se han desplegado estos sellos como prueba piloto. Aquí la Oficina de Prevención y Control de Epidemias es capaz de monitorear las 24 horas a las personas aisladas. El sello magnético puede integrarse con el sistema de alarma de la casa y permite almacenar datos como información básica del usuario y su familia, entradas y salidas, así como también el periodo de aislamiento.

El único inconveniente es que los sellos no son capaces de determinar el motivo por el que la persona abandona su casa. En Zhengzhou los oficiales recibieron una alerta y al llamar al usuario descubrieron que solo había salido a tirar la basura.

A pesar de eso, el personal de la comunidad que está a cargo de revisar a las personas aisladas dijo que esto facilita su tarea. Si el sello emite una alarma, los trabajadores llamarán a la persona para preguntarle por qué salió. Esto, según ellos, es mucho más eficiente que hacer una revisión manual en cada casa.

Los sellos electrónicos son retirados una vez que ha concluido el periodo de cuarentena y son reconfigurados para instalarlos en la puerta de otra persona.