Baby Yoda se ha robado la serie The Mandalorian de Disney+. El director Jon Favreau y el artista Christian Alzman dieron vida a uno de los personajes más emblemáticos del universo de Star Wars. Curiosamente, los planes para esta diminuta criatura eran distintos, ya que el equipo de producción pensó en crearlo por completo en CGI y no como un títere.
De acuerdo con Vanity Fair, tanto Favreau como el productor ejecutivo, Dave Filoni, no estaban seguros de poder alcanzar el nivel de credibilidad con un puppet de Baby Yoda, por lo que intentaron filmar la misma escena dos veces para sobreponer en una a la versión digital del personaje.
Un pequeño, pero gran enigma: todo lo que deberías saber sobre Baby Yoda
El dúo desistió de hacerlo luego que Werner Herzog, el afamado director y antagonista de la serie, les dijera ""¡Cobardes! Déjenlo". Herzog, quien está acostumbrado a explotar la creatividad en sus películas, deseaba que el equipo de producción se las ingeniara para seguir adelante con la versión física.
La participación de Baby Yoda ha sido posible gracias al uso de títeres, animatronics y un poco de CGI en postproducción. Favreau ha seguido un camino similar al que tomó Rian Johnson en Los Últimos Jedi, cuando trajo de vuelta al viejo Maestro Yoda con la ayuda de un títere y efectos especiales y el resultado fue sorprendente.
Disney y Jon Favreau pudieron optar por una versión completamente digital de Baby Yoda. Esto no sería raro, después de todo, George Lucas decidió sustituir la versión original de Yoda en La Amenaza Fantasma por una completamente CGI cuando se lanzó el Blu-ray con el fin de mantener el mismo diseño en toda la nueva trilogía.
Lo cierto es que Baby Yoda ha sido toda una revolución y ahora los fanáticos esperan ansiosos más capítulos con su participación, así como mercancía oficial de la serie que estará disponible hasta Navidad.