Es su primer cumpleaños, pero ya llevan un largo camino recorrido. Presentes en los grandes eventos de emprendimiento y tecnología, como el South Summit, y en algunos festivales de música, como Las Noches del Botánico, Wondo se ha encuadrado en un sector que ha despuntado en los últimos meses. Especialmente en encuentros musicales; un entorno que consideran es el mejor por el perfil de sus usuarios.

No son los primeros en el sector, Chipi App entró hace tiempo con un modelos de agregación similar. Una aplicación a través de la cual encontrar los diferentes servicios de movilidad disponibles, en este caso en Madrid. Motos compartidas, bicis, coches, patinetes eléctricos... y, en Wondo, también taxis compartidos. La diferencia entre ellas, explica Jesús Castells de compañía, "es en huir de la simple agregación de APIs". En una competencia sana, la estrategia de la nueva tecnológica es la de llegar a un acuerdo con todas las compañías antes de integrar su actividad en la aplicación. De esta manera, añade, "tienen la posibilidad de ofrecer bonos descuento y tiempo en forma de transporte". Asumen, por otro lado, que "este proceso es mucho más lento, porque tienes que llegar a un acuerdo con todos". Cuentan con Zity, Emov y Wible en el área de los coches –Car2Go, propiedad de Daimler, les siguen considerando como comentecia–. Coup, Ioscoot y eCooltra en el área de las motos. Voi para el mundo de los patinetes. De momento pocos, comparado con la magnitud de 22 compañías patinetes circulando por Madrid, pero trabajando en ganar más aliados.

Igualmente, cuentan con el mismo problema que Chipi: el hecho de tener que salir de la aplicación. Con la alta densidad de tecnológicas circulando por el mundo de la movilidad, en lo que se ha convertido en un océano azul, el número de aplicaciones ha crecido de forma exponencial. Tanto que, sumándole la normativa de patinetes de Carmena, se ha convertido en un problema. "Estamos trabajando en lo de no tener que salir de la aplicación", explica Castells. Asumen que les costará un tiempo, pero tienen previsto que la integración no les cueste más de un año; al menos con las compañías que tienen agregadas.

A futuro, explican, estarán abiertos a nuevos modelos de movilidad: limusinas, para servicios premium, o aviones privados para una nueva escala de negocio.

Sin preocupaciones por la financiación

De momento en Madrid, su idea es salir a Barcelona, Valencia, Bilbao y Sevilla antes de que termine el año. En el extranjero, de momento solo en Portugal, también tienen el foco puesto. Para ello tendrían que lograr más financiación de la actual.

Una de las ventajas de Wondo es que nació bajo el ala de Ferrovial. La constructora española encontró en la movilidad su hub de innovación. Wondo comenzó siendo un agregador de transporte –como continuación lógica a Zity –de la que es inversora la constructora–, pero esto solo era el embrión de todo un ecosistema. Ahora, explican, "se están desarrollando nuevos proyectos para las ciudades".

En cualquier caso, el hecho de tener la parte de la financiación cubierta, genera otro tipo de sensaciones.

"El hecho de tener a Ferrovial es una gozada. Yo que he sido emprendedor de mi bolsillo pues imagina, solo el stand en una feria suponía el presupuesto de un año... Así que la financiación de momento solo es Ferrovial, aunque una internacionalización requeriría nueva financiación."

Del lado de los taxis

Aunando la actividad del transporte público de la capital, con los que tienen un acuerdo, Wondo cuenta con una relación especial con el sector del taxi. Dejando a un lado las compañías de servicios VTC, lideradas por Uber y Cabify, la app de movilidad ha llegado a un acuerdo con varias gremiales del taxi. Han sido capaces de introducir un servicio que, hasta hace poco, no estaba permitido en la Comunidad de Madrid: el taxi compartido. En febrero de este mismo año, el Pleno del Ayuntamiento aprobaba la medida que permitía al taxi ofrecer servicios compartidos. Solo imponía un límite: con precontratación para poder organizar las paradas y el precio, el cual nunca debería superar el precio último del trayecto.

Wondo solo tiene que distribuir a los usuarios en los coches, los cuales funcionarán con paradas al uso; solo que a un precio cerrado –en algunos casos no superaría los 3 euros por persona–. Ellos, dados de alta como empresa de turismo, serían los contratadores últimos del servicio; por lo que, hasta la fecha, entran dentro de la normativa de la Comunidad de Madrid.