Dos muertos en un avión, que ha sido puesto en cuarentena en el aeropuerto Internacional Gengis Kan de Ulán Bator (en Mongolia), nos recuerdan una triste realidad: la peste bubónica o la muerte negra, como se la conocía en la Edad Media, no es una enfermedad que se haya erradicado.
No es una infección solo del siglo XIV y muchos países todavía sufren sus efectos. Ahora ha sido Mongolia, pero en 2017 fue Madagascar, así que en algunos países incluso se trata de una enfermedad endémica: ¿qué es la peste bubónica? ¿Y qué significa eso de que es una enfermedad endémica? ¿Podría haber más contagios?
La peste bubónica o peste negra es provocada por la bacteria zoonótica Yersinia pestis, que suele encontrarse "en pequeños mamíferos y en las pulgas que los parasitan", tal y como señalan desde la Organización Mundial de la Salud (OMS). Las variantes más mortales de esta infección que se desarrollan en los humanos son las formas séptica y neumónica, según apuntan desde la OMS. Aunque es mortal y puede matar en apenas diez días, existe una cura, es decir, con antibióticos y detectándose a tiempo se puede sobrevivir.
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¿Cómo es el contagio? Entre animales el vector son las pulgas, en el caso de los humanos además de estas también hay otras dos vías de contagio: "Contacto directo con líquidos corporales infectados o materiales contaminados" y "la inhalación de gotículas respiratorias o pequeñas partículas de pacientes con peste neumónica". De hecho, entre la peste bubónica y la pulmonar, la segunda es "invariablemente mortal si no se trata pronto", además de "especialmente contagiosa y puede desencadenar epidemias graves con transmisión de persona a persona". Sin embargo, no hay que alarmarse de una posible pandemia ya que en Mongolia se están tomando precauciones para evitar más contagios.
La peste pulmonar tiene un ciclo de evolución que puede ser muy corto sin ayuda de antibióticos, ya que es capaz de matar al enfermo entre 18 y 24 horas después de comenzar con los síntomas. Los fármacos que se utilizan en este tipo de peste son los que habitualmente se usan contra las enterobacterias (bacilos Gram-negativos) y "pueden curarla si se administran con prontitud", apuntan desde la organización de la salud. Aunque también señalan sobre la mortalidad que las cifras de supervivencia no son muy positivas: "La peste puede ser una enfermedad muy grave para el ser humano. En ausencia de tratamiento, la peste bubónica tiene una tasa de letalidad del 30% al 60%, y la neumónica resulta invariablemente mortal".
En el caso de la peste bubónica, primero hay un periodo de incubación que puede durar una semana, tras esto llegan los síntomas más clásicos de una infección como puede ser "fiebre de aparición súbita, escalofríos, dolor de cabeza y dolores generalizados, debilidad, náuseas y vómitos", apuntan desde la OMS. Lo más significativo es la inflamación de los ganglios, que se tensan y al ser palpados, duelen. A estos bultos que se forman en ingles, axilas y cuello, se les denomina bubón, de ahí el nombre de la enfermedad. Una vez avanza la infección, los bubones pueden convertirse en llagas abiertas y supurantes, pero desde la OMS señalan que "la peste bubónica raramente se transmite entre personas". No obstante, "puede evolucionar y diseminarse a los pulmones, causando una forma más grave de la enfermedad denominada peste neumónica".
La peste neumónica o pulmonar "es la más virulenta", afirman desde la OMS. "El periodo de incubación puede ser de tan solo 24 horas. Cualquier persona con peste neumónica puede transmitir la enfermedad a otras personas a través de gotículas respiratorias", indican. "En ausencia de un diagnóstico y un tratamiento precoces, esta forma es mortal. Sin embargo, las tasas de curación son altas si la enfermedad se detecta y se trata a tiempo (dentro de las 24 horas posteriores a la aparición de los síntomas)", indican. Los síntomas son "tos, con sangre en la expectoración; dificultad para respirar, náuseas y vómitos, fiebre alta, dolor de cabeza y debilidad", según informan desde la Clínica Mayo.
Enfermedad endémica
No es extraño que haya aparecido ahora la enfermedad, ni siquiera está erradicada realmente a pesar de que existe un antibiótico que lo cura, ya que su principal transmisor son animales. En muchos países, como Mongolia y Madagascar, incluso es endémica, pero ¿esto qué significa? Esto quiere decir que en determinadas zonas geográficas la infección continúa presente, es decir, que siempre hay posibles vectores que puedan contagiar a la población. Por ejemplo, entre otras enfermedades endémicas está la malaria en África. Otros países en los que la peste bubónica es endémica son la República Democrática del Congo y Perú, apuntan desde la OMS. "Ha habido epidemias de peste en África, Asia y Sudamérica, pero desde la década de 1990, la mayoría de los casos humanos se han concentrado en África", comentan. "En Madagascar se notifican casos de peste bubónica casi todos los años durante la temporada epidémica (entre septiembre y abril)", añaden.
No obstante, nadie se escapa a la posibilidad de una plaga de peste bubónica. La OMS lanzó en 2016 un estudio que incluía este mapa con los países que más opciones tienen de ser focos de peste, elaborado con datos históricos, pero también de los años en los que se realizó la investigación. Como curiosidad, hay focos de esta enfermedad en todos los continentes excepto en uno: Oceanía es el único que se libra.
Medidas de contención
Sabemos que el matrimonio fallecido en un avión había cazado de forma ilegal una marmota y se la había comido. Esta parece ser la principal causa de que se infectaran con peste.
Por ellos ya no se puede hacer nada, pero el resto de persona que han estado en contacto mientras desarrollaban la enfermedad tendrá que estar en cuarentena para ver si también se han contagiado, además de tomar medicación preventiva: Mongolia está tratando de hacer todo lo posible por contener una posible epidemia a gran escala y por eso mantiene a todas las personas que han estado en contacto con el matrimonio bajo vigilancia médica y ha cerrado la frontera con Rusia para que los posibles contagiados no propaguen la enfermedad fuera de su tierra.