A prácticamente un año de la muerte de una mujer de 49 años de edad en marzo de 2018, en Tempe, Arizona, que fue atropellada por uno de los vehículos autónomos de Uber mientras cruzaba una calzada por un paso de peatones, los fiscales estadounidenses han determinado que la empresa de transporte privado no es penalmente responsable del deceso de Elaine Herzberg.

Este martes, el fiscal del condado de Yavapai ha dado a conocer en una carta pública, según recoge *Reuters*, que "no había base" para la responsabilidad penal de Uber. No obstante, el conductor del vehículo, Rafael Vásquez, será remitido a la policía de Tempe para una investigación adicional.

En un principio, los vídeos de las múltiples cámaras incorporadas en el vehículo autónomo mostraban que la mujer salía desde las sombras hacia la carretera. Estos primeros datos parecían confirmar que la culpa no había sido ni del conductor ni del sistema autónomo de Uber, ya que el tiempo de reacción había sido prácticamente nulo.

Sin embargo, según un informe policial de junio pasado, Vásquez se encontraba viendo la transmisión en vivo de un programa de televisión a través de su smartphone al momento del incidente. La policía obtuvo registros de Hulu, con los cuales confirmó que estuvo viendo el programa La Voz durante unos 42 minutos la noche del accidente, hasta las 21:59 horas local. "Coincide con el tiempo aproximado de la colisión", señala el informe, según recoge el mismo medio.

Un vehículo autónomo de Uber atropella y mata a una mujer

Por lo anterior, la policía calificó el accidente como "totalmente evitable" y él podría enfrentar cargos de homicidio vehicular. Los oficiales creen que Vásquez estuvo mirando en repetidas ocasiones hacia abajo y no hacia la carretera, levantando la vista medio segundo antes de que el vehículo atropellara a Herzberg.

Ahora, la fiscal del condado de Yavapai, Sheila Sullivan Polk, ha dicho este martes que su investigación concluyó que "el video de la colisión, tal como se muestra, probablemente no describe con precisión los eventos ocurridos". En su carta indica que se requiere de un "análisis experto" para "concordar qué (y cuándo) la persona sentada en el asiento de conductor del vehículo pudo o debió de haber visto esa noche dada la velocidad del vehículo, las condiciones de iluminación y otros factores relevantes".

Por su parte, la Junta Nacional de Seguridad del Transporte y la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras también sigue investigando el accidente.

Uber suspendió todas las pruebas con vehículos autónomos tras este primer incidente mortal en Arizona. En diciembre pasado, reanudó las pruebas de estos coches pero solo de manera limitada en vías públicas en Pittsburgh (oeste de Pensilvania).