La cultura de Estados Unidos nos ha brindado grandes ideas como el sueño americano, American Dream, una filosofía que todavía pervive y que dice algo así como que cualquiera puede prosperar y tener éxito sin importar su origen social. Esta idea ha calado en todas partes del mundo, donde también se conoce como ascensor social. Si te esfuerzas, puedes subir a lo más alto. O al menos esta ha sido la idea durante décadas. Otra idea popular es la de los garajes de Silicon Valley.
Es una idea que ha calado en la cultura norteamericana. La del emprendedor que empieza en un garaje y acaba por dirigir una gran empresa con decenas de trabajadores y una gran sede. O al menos lo intenta. De abajo arriba con el sudor de la frente.
El cine, la televisión, incluso la publicidad, nos ha hablado de estos emprendedores de garaje, que de la nada han llegado a lo más alto. Y Silicon Valley está repleto de ejemplos, si bien no todos son del todo ciertos, o al menos merecen un matiz.
Puede que el Silicon Valley actual esté lleno de garajes con emprendedores que están creando la próxima Facebook o la siguiente Amazon. O puede que trabajen en una de esas viviendas unifamiliares tan características de la zona, alquilando una habitación, algo que hemos visto en la popular serie de HBO, Silicon Valley.
A continuación revisaremos los orígenes de grandes empresas con sede en el valle del silicio o muy ligadas a él y veremos hasta qué punto el mito del garaje es cierto o no.
1938, Hewlett-Packard
Empecemos por el principio, por el garaje que inició el mito. Y es que, aunque Bill Hewlett y David Packard fueron de los primeros en trabajar en lo que se convertiría en Silicon Valley, tal y como vimos en Silicon Valley antes de Google, Apple y Microsoft, su compañía Hewlett-Packard nació en 1938 en un garaje alquilado de Palo Alto con un capital inicial de 538 dólares de la época.
Se habían graduado como ingenieros electrónicos en la Universidad de Stanford tres años atrás y no fue hasta 1956 que se establecieron en lo que se llamó inicialmente Stanford Research Park y que fue el núcleo de lo que hoy es Silicon Valley.
Empezaron trabajando en osciladores de sonido y en los 60 se centraron en desarrollar semiconductores, que fue el gran boom de Silicon Valley, y que sirvieron para crear calculadoras e instrumentos. De ahí a las computadoras en los 70 y los periféricos en los 80 y en adelante.
Así que en este caso sí nos topamos con los garajes de Silicon Valley y el nacimiento de una gran empresa que todavía sigue en pie como gigante de la informática.
1975, Microsoft
En 1972, unos jovencísimos Bill Gates y Paul Allen, amigos de infancia, fundan su primera empresa, Traf-O-Data. Con sus conocimientos de programación, venden una computadora que permite analizar datos del tráfico de vehículos.
Bill Gates estudiaba en Harvard, mientras que Paul Allen estudió dos años en la Universidad Estatal de Washington y lo deja para trabajar como programador para Honeywell en Boston.
En 1975, su segunda aventura consiste en programar un intérprete de BASIC para computadoras Altair. El éxito de Altair BASIC, distribuido por Micro Instrumentation and Telemetry Systems (MITS), les empuja a fundar Microsoft ese mismo año, con Gates como CEO. Su sede estará en Albuquerque, Nuevo México, donde estaba la sede de su primer cliente, MITS, del que Allen será director de software. Nada de garajes de Silicon Valley.
En la historia de Microsoft no hay garajes de por medio. La primera sede de Microsoft en Albuquerque estaba en una oficina alquilada. Como curiosidad, Gates y Allen vivían en el Motel Sundowner. Cuatro años después, en 1979, se mudaron a Bellevue, Washington.
1976-1977, Apple
Cuando se habla de emprendedores, startups y garajes, uno de los ejemplos habituales es Apple y cómo nació en un garaje. ¿Pero fue así realmente?
Steve Jobs, Steve Wozniak y Ronald Wayne fundan Apple Computer Company en 1976. Al año siguiente le cambiarán el nombre por Apple Computer Inc. Pero en este primer año de vida, su primer producto, el Apple I, lo monta con sus manos el propio Steve Wozniak en su casa, sin garaje de por medio, y para un número limitado de clientes, básicamente los asistentes al Homebrew Computer Club donde fue presentado.
No es hasta el año siguiente, 1977, que Ronald Wayne decide apearse del proyecto y los dos Steve fundan Apple Computer Inc. con la ayuda financiera y los consejos de Mike Markkula, que invierte 250.000 dólares de la época.
Oficialmente se habla del garaje de Steve Jobs en Los Altos como lugar de nacimiento de Apple, pero el propio Steve Wozniak lo ha desmentido en varias entrevistas. “El garaje existe y tiene un valor importante en el nacimiento de Apple, pero sólo nos sirvió para hacernos sentir en nuestro hogar”. Es más, el propio Wozniak ha reconocido en varias ocasiones que aprovechaba sus ratos libres de trabajo en Hewlett-Packard para soldar y ensamblar componentes de las primeras computadoras Apple. Puede que de ahí venga parte de la leyenda sobre los garajes de Silicon Valley.
Sin embargo, hay matices. Sí, los primeros cincuenta pedidos del Apple I se montaron en el garaje de Steve Jobs, pero el manifiesto fundacional se redactó en casa de Wayne, en Mountain View. Y en cuanto se creó Apple Computer, Inc. en 1977, las primeras entradas de dinero permitieron alquilar una oficina en Cupertino y contratar a una docena de empleados.
El garaje de Steve Jobs tuvo un gran papel en el nacimiento de Apple, pero solo como centro de montaje de los primeros Apple I.
1994, Amazon
Amazon tiene su sede en Seattle, Washington, y nació en 1994 en Bellevue, también en el estado de Washington, separado de California por Oregón. Sin embargo, no deja de ser una de las multinacionales más grandes del mundo dedicadas a la tecnología, ya que además de la compra online y el streaming, una de sus principales líneas de negocio es el cloud computing con su subsidiaria Amazon Web Services.
Su origen también está asociado a Silicon Valley, y es que su fundador, Jeff Bezos, trabajó casi una década en Wall Street hasta que vio la oportunidad de unirse al éxito de las “puntocom”, muchas de ellas en California, y que recibieron mucha atención por parte de inversores de Wall Street entre 1995 y 2000. Así pues, en 1994 dejó Wall Street, en New York, y se plantó en Seattle, Washington, donde empezó a trabajar en su plan de negocio. Primero lo llamó Cadabra pero pronto lo cambió por Amazon porque no sonaba tan mal como su primer nombre.
¿Dónde están los garajes de Silicon Valley en esta historia? Pues bien. Aunque Jeff Bezos había prosperado en Wall Street y su último empleo había sido como vicepresidente en una firma de inversión, Amazon vivió sus primeros días en el garaje de la vivienda de Bezos en Bellevue, Washington. Y aunque en la actualidad puedes comprar de todo, Amazon nació como una librería online. En sólo dos meses, fue capaz de atender pedidos de los 50 estados de Estados Unidos e incluso de más de 45 países de todo el mundo. Cómo lo consiguió es otra historia.
1997, Netflix
Marc Randolph y Reed Hastings fundaron Netflix a finales del verano de 1997 en Scotts Valley, California. Y no en un garaje precisamente, ya que Hastings invirtió 2,5 millones de dólares para el proyecto.
¿De dónde venía ese dinero? Hastings había fundado a finales de 1991 su propia empresa, Pure Software, junto a otros dos socios. En 1996 se fusionaba con otra compañía, pasando a llamarse Pure Atria. Y en 1997, Rational Software compraba Pure Atria por 700 millones de dólares, la mayor adquisición de Silicon Valley por aquel entonces.
Con parte del dinero ganado, Hastings decide crear Netflix junto al que era director de marketing en Pure Atria. De todo esto sólo podía salir algo bueno. Inspirados por Amazon, que por aquel entonces llevaba ya tres años vendiendo libros por internet, decidieron especializarse en vender o alquilar películas en formato DVD por correo ordinario. Algo arriesgado, ya que el DVD se había introducido en el mercado estadounidense ese mismo año. Pero, teniendo en cuenta el dinero con el que contaban, para nada necesitaban trabajar en uno de los muchos garajes de Silicon Valley.
Netflix, el primer videoclub online de películas en DVD, abrió sus puertas en 1998 con 30 empleados y un catálogo de 925 títulos. Los precios variaban en función de la cantidad de películas alquiladas y durante cuánto tiempo, al estilo de su rival física Blockbuster. Y como novedad, podías suscribirte pagando una cantidad mensual para acceder a todo el catálogo. El resto de la película es otra historia.
1998, Google
Dos estudiantes de la Universidad de Stanford realizan un proyecto de investigación que tiene como propósito entender cómo funciona la World Wide Web desde el punto de vista matemático y cómo puntuar las páginas web al estilo de las publicaciones académicas: cuantas más referencias se hagan a esa página, mejor nota tendrá.
Los estudiantes son Larry Page y Sergey Brin, la investigación tiene el nombre de BackRub y dará pie al algoritmo del mismo nombre, luego renombrado como PageRank, y que dará vida a lo que todos conocimos como Google Search.
Google se crea como empresa en 1998, dos años después de programar PageRank en Stanford. Y es que la primera vez que el buscador Google estuvo online fue en agosto de 1996 y con el dominio google.stanford.edu. Pero hasta donde sabemos, Google no se creó en los garajes de Silicon Valley. Ni siquiera en un garaje de Stanford.
Google tendrá su sede en un garaje de Menlo Park, California. Su propietaria, una amiga de Larry y Sergey, Susan Wojcicki. En un par de meses, Google indexa más de 60 millones de páginas y recibe la atención de la prensa especializada y de los inversores, ávidos de ganar dinero con una “puntocom”.
De ahí que a los pocos meses abandonan el garaje donde empezó Google para mudarse a las oficinas del número 165 de University Avenue, en Palo Alto, junto a otras startups tecnológicas.