La llegada de Steam Link a los móviles ha sido la última trampa que ha terminado por acabar con el hardware. Aunque no ha sido anunciado de forma oficial, todo parece indicar que Valve ha decidido descontinuar el hardware relacionado con Steam Link mientras deposita toda su confianza en el móvil en un relación que no ha terminado de cuajar.
A día de hoy, no queda stock del producto en Europa y está próximo a agotarse en Estados Unidos en un movimiento similar a de la muerte de PlayStation TV: un dispositivo idéntico a Steam Link que no terminó de cuajar en un ecosistema en el que parece que este tipo de dispositivos secundarios no han conformado el mercado que sus creadores esperaban.
Steam Link siempre lo tuvo complicado. Por un lado, su precio bajo parecía indicar que sería un éxito el permitir trasladar la experiencia del PC a la TV sin la necesidad de poner una consola tradicional en el mueble del salón, pero sus fallos constante -achacados casi siempre a la red doméstica del usuario- y el poco éxito de su mando hicieron que muchos usuarios relegasen el producto a un segundo plano, más con alternativas competentes en este sentido como las de Nvidia que sí que son capaces de trasladar toda la experiencia de juego.
En el móvil las cosas no les van muy bien, al menos desde el punto de vista de la penetración. Sí, está disponible en Android, un mercado mayoritario, pero Apple se ha negado en rotundo a permitir su llegada a la App Store por ser la puerta abierta a un tienda de terceros de la que ellos no verían comisión al permitir compras a través de Safari.
Es más, con dispositivos tan potentes como el iPad Pro o los iPhone actuales, la llegada de Steam Link de la mano de Apple y Valve podría ser un punto de partida sin precedentes para convertir a la plataforma de los de Cupertino (también al Apple TV) es un soporte para juegos de alto rendimiento, pero parece que a corto plazo no veremos este movimiento.
Ahora y con el dispositivo que vio nacer al concepto de llevarte el PC y tu biblioteca a la TV de salón en caída libre, y con el rumoreado hardware de Valve para plantar cara a la consola todavía en el limbo, parece que a la compañía solo le queda Steam, algo que es suficiente viendo su dominio absoluto de la venta de videojuegos en el PC. Al final, son los ganadores del software.
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