Se había presentado la 'cautelarísima' por parte de la CNMC y se había rechazado en primera instancia. Después, Fomento se posicionó en contra de la decisión de Colau reclamando sus competencias. El sector de los taxis argumentaba que, hasta que un juez no se posicionase, la situación aún estaba de su lado; de hecho, ante la decisión del Ministerio, el sector del taxi había convocado varios paros para las próximas semanas. El momento más esperado ha llegado. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, según ha adelantado El Confidencial, acaba de suspender el texto protaxis gestado por el Ayuntamiento de Ada Colau de manera cautelar.
Sobre la mesa, la duda que Fomento ya había adelantado a los medios: ¿el Ayuntamiento de Barcelona tenía competencias en la regulación de las licencias VTC? La disposición actual de la Ordenación de los Transportes Terrestres apunta a que esta limitación corresponde al Ministerio de Fomento o, en su defecto, a las Comunidades Autónomas. Por esta razón, para el Ministerio el papel de Ada Colau se excedía desde todo punto. De hecho, antes de la puesta en marcha del texto a favor del taxi, la alcaldesa de Barcelona intento modificar el punto que limitaba esa situación.
El texto de la alcaldesa de Barcelona para el Área Metropolitana proponía, entre otras cuestiones, la creación de una licencia urbana para todos aquellos conductores de licencias VTC. Otorgados por sorteo, estos permisos tenían la vocación de ajustarse a la normativa de un permiso VTC por cada 30 de taxi. Todo aquello que se saliese de este margen quedaría fuera de la ley. Esta misma propuesta estaba siendo gestionada por varias gremiales del taxi en la capital; misma ideología política que en el Ayuntamiento de Barcelona.
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Una medida que, sin duda iba directamente a por la actividad de Uber y Cabify, los competidores de los taxis en la Ciudad Condal, ha sido suficiente para el TSJ. Desde este posicionamiento, en la línea de la CNMC, para el Tribunal supone una situación de impacto en la competencia en el negocio del transporte en las ciudades. Lo que, sin duda, genera una situación de ventaja para el negocio del taxi en Barcelona.
