Se empezó a hablar de ellos hace un par de años: aquellos que querían revolucionar el mercado de los aparcacoches en la ciudad. Un servicio tradicional que, como venía pasando en todos los sectores, sufriría la evolución de la tecnología y apenas contaba con competencia en aquel momento. Si la idea funcionaba en hoteles y restaurantes, ¿acaso no podía cuajar en toda una ciudad gracias a una aplicación? Nacía así Valeet en octubre de 2016 en su fase de pruebas para estar disponible al público en diciembre de ese mismo año. La realidad es que la idea principal poco o nada tenía que ver con la actual.

En menos de un año, el modelo de negocio de Valeet sufrió un giro de 180 grados. "Empezamos a ver los datos y escuchar al mercado", explica en fundador de Valeet, Carlos Jiménez. "La reserva media en las zonas cercanas a Atocha pasaron de tres horas a una de tres o cuatro días", añade. Dicho y hecho, el modelo de negocio de Valeet cambió de la noche al día a otro que era mucho más rentable para la compañía. Los costes de recoger y devolver el coche eran los mismos que en la idea original, pero llegar a acuerdos con parkings para más días era más fácil. Además, explica el fundador, con el aparcamiento en la ciudad era complicado prever los recursos. Los aeropuertos y estaciones suponían menos estrés y un sistema fácilmente replicable en más geografías. Con todo esto volvieron a lanzar la compañía el 15 de julio de 2017; después de dos semanas el éxito estaba en sus manos. Con una diferencia de dos semanas entre geografías, decidieron seguir con Barcelona, San Francisco y Oakland. Un año después se han aventurado a Nueva York y Miami.

A por la ronda de los 20 millones de ¿dólares?

Su fundador, Carlos Jiménez, venía directamente desde la cuna de la innovación: Silicon Valley. En Movoto y Trov desde hacía tiempo, el emprendedor estaba dentro del sector en Estados Unidos. ¿Por qué no montar su compañía allí? Una circunstancia familiar le trajo de vuelta a España y, con ella, la creación de su tecnológica. Ahora, dos años después están pensando en desandar el camino y volverse a Estados Unidos. Ahora bien, ¿qué pasará con Valeet?

"El volumen de negocio está más o menos igual en este momento, pero poco a poco Estados Unidos está empezando a superar el volumen de España. Por esta razón, estamos en el proceso de redomesticar la compañía. Lo que vamos a hacer es poner la matriz en Estados Unidos y la filial en España. La compañía empieza a tener una mentalidad más americana que española, con más desarrollo allí que aquí y buscando financiación y socios allí".

Un proceso parecido al sufrido por Cabify, pero añadiendo la sede física de la startup. Sin decisión final sobre cómo gestionarán el tema de los empleados aquí en España, la situación de la sede sigue siendo una incógnita para ellos. Financiados por Plug and Play en su anterior ronda, de momento ocupan parte de sus oficinas en la bahía de San Francisco. De momento se van a quedar allí, es donde reside la financiación, pero apuntan a Los Ángeles o, incluso, Miami. Una zona estratégica por horario (a 6 horas de España y 3 de San Francisco) y por su relación con el mercado de Latinoamérica. Para Valeet unas regiones estratégicas a futuro. De hecho, explica Carlos, están en conversaciones para entrar en Chile, Argentina o México con una prueba antes de que finalice 2018. De nuevo, añade, "siguiendo la pauta del éxito de Cabify".

Con una facturación actual de unos 800.000 euros, con previsión de superar el millón de euros en el total de 2018, Valeet de momento no es rentable a nivel global. Madrid, Barcelona y algún aeropuerto en Estados Unidos ya gozan de esta situación, pero como explica su fundador "cada euro es reinvertido en seguir creciendo". Y esto lo saben los invesores, un sector de sobra conocido para la tecnƒológica. En una perpetua ronda de financiación, Valeet cerró una primera operación seed en 2017. 615.000 euros de la mano de Plug and Play, Andreas Mihalovits, también business angel de Comprea, Albert Armengol o Alberto Gutierrez. Una operación que, analiza el fundador, no fue complicada:

Solo teníamos un power point con un plan que no ha sido al final. Por ese punto chapó por la financiación española. Por eso creo que en las primeras rondas lo están haciendo muy bien, otra cosa es con las rondas mas grandes, porque no hay mercado alternativo. Y esa es la que tiene tirón en EE.UU."

Spotahome levanta 40 millones de euros y da la entrada a la primera inversión de un fondo de EE.UU en España

Fue precisamente esa región la que abordaron en su segunda operación. En diciembre de 2017 empezaron con una ronda de notas convertibles bajo un modelo puramente estadounidense; con casi 1,8 millones recaudados el objetivo es llegar a los 2,5 millones. Para esa primera mitad se ha contado con inversores de la primera operación, como Andreas Mihalovits. El resto ha tenido que migrar al otro lado del charco precisamente por las notas convertibles; ese sistema no gusta al inversor español. "Algunos por desconocimiento, otros por que no las entienden y, otros, porque no quieren entrar en ese juego", explica Carlos. Igualmente, con este sistema cuentan con un CAP de 7 millones de euros, casi el doble que su primera nota convertible.

Ahora están trabajando en la megaronda. De forma paralela a sus notas convertibles ya están negociando la Serie A. Sin fecha aproximada, aunque auguran que para el año que viene, quieren partir de unos 20 millones de dólares. Plug and Play se reserva para esta ronda, al igual que algunos VC made in Estados Unidos con los que ya están en negociaciones. GR Capital ya suena para Valeet entre otros. Y quizá Seaya, el fondo que ya entrase en Glovo, Cabify o Spotahome, con los que también se han sentado a negociar.