Bungie es consciente de que tiene que cambiar el rumbo de Destiny 2, un videojuego cuya popularidad ha caído mucho más rápido que la de su predecesor. Las primeras expansiones no han ayudado a ello y, por lo tanto, el siguiente paso era centrarse en la gran expansión que llegará un año después del lanzamiento original. Hoy han presentado Forsaken, la expansión llamada a cambiar Destiny 2 y añadir contenido durante el segundo año de vida del título.
Todo empieza con la huida de cientos de enemigos de una prisión de alta seguridad en la Costa Enredada. Así, la nueva zona del Arrecife que recorreremos será un lugar sin ley en el que se desatará el caos. Y ahí, claro, entrarán nuestros guardianes. En una experiencia que, afirman, bebe de películas western en la que, como ocurriera con The Taken King, incluirá nuevas subclases, decenas de nuevos ítems (entre ellos un nuevo tipo de arma, el arco), mayores opciones de personalización y, cómo no, una nueva raid que tendrá lugar en un escenario dedicado exclusivamente al contenido endgame, la Ciudad Onírica.
Uno de los elementos en los que más han centrado su atención ha sido en un nuevo modo de juego, mezcla de PVE y PVP. En Gambit, como se ha bautizado, dos equipos de 4 jugadores tendrán que eliminar enemigos en escenarios separados hasta enfrentarse a un gran jefe de final de ronda; el primero de ambos equipos que lo consiguiera se llevaría la victoria. La mecánica PVP llega mediante la posibilidad de, en ciertos momentos de la partida, de que un jugador de cada equipo invada el escenario rival para eliminar a jugadores contrarios.
Destiny 2 se actualiza para ser más rápido e intenso
Otros detalles anunciados serán las secciones de Triunfos y Colecciones en la interfaz de usuario. En la primera podremos consultar una serie de objetivos que cumplir que funcionan a modo de los clásicos logros o trofeos y, en la segunda, podremos comprobar todos los objetos que hemos conseguido (desde armas y equipamiento hasta shaders y emblemas) y cómo conseguir aquellos que todavía no tengamos en nuestro poder.
Las armas, principales protagonistas de la experiencia, también recibirán una buena ración de cambios: sus modificadores serán aleatorios, se rediseñará el sistema masterworks y, quizá el cambio más relevante, podremos utilizar cualquier tipo de arma en cualquier slot, sin restricciones.Destiny 2: Forsaken (Los renegados en los mercados hispanohablantes) llegará el 4 de septiembre a PC, Xbox One y PlayStation 4.