coches electricos

Tesla se ha ido haciendo un hueco en los últimos años como la marca de referencia en vehículos eléctricos para transporte público, tales como los taxis, o transporte privado, como los VTC (Uber, Cabify, etc...). Las ventajas que supone el uso de los modelos de la compañía eran hasta ahora un buen incentivo para invertir en ellos, algo que se verá ahora reducido debido a una actualización en la política de uso de los Supercargadores.

Una de las principales ventajas del uso de coches eléctricos se da en entornos urbanos, donde el consumo de combustible en vehículos tradicionales se ve incrementado. Esta es una de las razones de que las berlinas negras de Tesla sean ya habituales de ver en las principales ciudades del mundo, pudiendo incluso elegir el modelo concreto que se quiere utilizar al solicitar el servicio desde la aplicación. Aunque en España es aún minoritario el uso dentro del sector del taxi, en ciudades como Ámsterdam llevan utilizando flotas compuestas únicamente de vehículos Tesla desde ya años.

Los Supercargadores de Tesla llegan al centro de las ciudades

Sin embargo, este comienzo en la masificación de los vehículos de la marca para su uso dentro de servicios de transporte parece estar afectando de manera negativa a la red de Supercargadores de la compañía, los puntos de carga más utilizados. El uso de mismos por parte de taxis, Uber y demás plataformas estaría provocando la saturación de los mismos, impidiendo que los propietarios particulares puedan hacer uso de ellos.

La Política de Buen Uso de los Supercargadores

Introducen así una política de "buen uso" de los Supercargadores, indicando que no se haga uso de los mismos si el vehículo está siendo utilizado como taxi, para redes de transporte privado (VTC), para repartir o transportar bienes de forma comercial, para usos gubernamentales o para cualquier otra actividad comercial.

En el caso de que cargue su vehículo de tal forma que incumpla lo dispuesto en esta Supercharger Fair Use Policy, podremos requerirle para que modifique tal conducta. Asimismo, podremos adoptar medidas adicionales que protejan la disponibilidad de los Supercargadores para su finalidad prevista, tales como limitar o bloquear la capacidad de su vehículo para utilizar estaciones de Supercargadores.

Esta política toma efecto inmediato a partir de ahora, aunque desde Tesla indican su posición favorable hacia el uso de sus vehículos como opción para transporte comercial y servicios mencionados. Ante esta nueva normativa, indica la posibilidad de ponerse en contacto con el vendedor local para ver cuáles son las opciones de carga más adecuadas en cada caso sin tener que recurrir a los mencionados Supercargadores.

Queda abierto así un nuevo escenario en el que estas restricciones podrían jugar un papel importante para la expansión a corto plazo de estos vehículos por parte de empresas de transporte, mientras la adopción de cargadores propios se regulariza. Por el momento, ninguna empresa ni colectivo se ha pronunciado al respecto.