Tras la correspondiente espera, el iPhone X ya está en manos de los millones de compradores alrededor de todo el mundo que hoy se han hecho con uno de los nuevos terminales de la compañía. Este nuevo teléfono, todo pantalla y con escáner facial, incorpora, además de la carga inalámbrica, también carga rápida para poder llenar la batería del smartphone hasta la mitad en apenas media hora. ¿El problema? No puede hacerse con los accesorios incluidos.
A pesar de soportar la carga rápida, Apple no ofrece los medios para ello con la compra del dispositivo, sino que habrá que realizar una inversión extra para obtener esta posibilidad. La cantidad de la misma dependerá de las velocidad que se quiera obtener, aunque todas las opciones suponen un gasto extra importante para un teléfono que pasa de los 1.100 euros en su versión más económica.
Los 8 mejores cargadores inalámbricos para iPhone 8 y iPhone X
Carga rápida, rápida
La carga rápida de verdad, la promocionada por Apple, solo puede obtenerse a través de un cable Lightning a USB de tipo C (además del correspondiente cargador de pared). Mientas cargadores se pueden encontrar de diferentes marcas, los cables de Lightning a USB-C solo los fabrica la propia empresa, por el momento. Así es que para obtener esta carga rápida habrá que comprar el cable Lightning a USB-C de 1 metro de longitud (29 €) o la variante en 2 metros de longitud (39 €).
No ocurre así con los cargadores de pared, los cuales pueden encontrarse en diferentes opciones, además de la de Apple. Aquí juegan con ventaja los propietarios de alguno de los nuevos MacBook con carga mediante USB-C, pues ese mismo cargador de 29W servirá para usarlo con el cable Lightning y obtener la deseada carga rápida.
Para aquellos que no lo tengan, pueden comprarlo por separado en Apple (59 €) o pueden hacer uso de alguna de las opciones genéricas de otros fabricantes. Aquí las opciones varían, pero el Lumsing de 48W (25,99 €) o el Inateck de 45W (29,99 €) son buenas opciones si no se quiere invertir en el de la propia marca.
Carga rápida, pero no tanto
De igual manera, se puede obtener una carga que es más rápida que la carga normal pero no tanto como para obtener el espectacular resultado del 50% en media hora. La buena noticia es que saldrá más barato, pues únicamente habrá que comprar un cargador de mayor potencia –en el caso de que no se tenga ya– y hacer uso del propio cable USB-A que viene con el iPhone.
Las opciones aquí son más variadas, encontrando también una de la propia Apple que no es otra que el cargador del iPad de 12W. Además de este, se pueden comprar, por ejemplo, un Aukey de 18W (9,99 €), otro de la misma marca, pero de 30W (15,99 €), o un Anker de 24W (11,99 €).