Dos días después del devastador terremoto de magnitud 7.1 en el centro de México, las ayudas siguen llegando de todas las maneras posibles. Además de los centros de acopio, los albergues y la ayuda de todos los ciudadanos en las zonas afectadas, la tecnología ha sido un aspecto clave para centralizar las acciones de apoyo a los afectados.
México, lugar de solidaridad tras el fuerte terremoto
Los mensajes de WhatsApp, los avisos por redes sociales y la cooperación de compañías como Google, Uber y Cabify han hecho más fácil que la ayuda llegue a donde más se necesita. Por otro lado, la tecnología también ha podido aportar su grano de arena en iniciativas como la de la Universidad Panamericana de Aguascalientes (UP), la cual ha creado un robot especializado en tareas de rescate para ayudar en terremotos como el que azotó estados como Puebla, Morelos y la Ciudad de México.
En náuhatl, Ixnamiki Olinki significa máquina buscadora de personas, el nombre que le han puesto al robot y que ha cobrado todo el significado después del sismo del pasado 19 de septiembre. A las labores de exploración del robot de unos 200 kilogramos de peso se han ido implementando innovaciones tecnológicas como la instalación de conexión Wi-Fi o Ethernet, sensores, cámaras de alta definición y sensores de Co2 para poder identificar cuando una persona atrapada está respirando. "A estas características le hemos añadido otras como una linterna para alumbrar en las zonas de rescate", explicó Juan Carlos García Sánchez, director de la Facultad de Ingeniería de la UP Aguascalientes, en entrevista con Hipertextual.
Ixnamiki Olinki es capaz de abrir y cerrar puertas o mover objetos de entre los 30 y los 50 kilos. Además, el brazo del robot puede ser utilizada para transportar aparatos de comunicación, medicamentos o agua para las víctimas de desastres. El objetivo es que el operador o los rescatistas no corran el riesgo de entrar en zonas inseguras como edificios frágiles o con peligro de derrumbe tras un terremoto. García Sánchez destacó:
> El robot puede hacer un recorrido para analizar los edificios que no fueron destruidos pero que tiene fallas estructurales y es muy riesgoso que las personas entren.
Tras el sismo de 7.1, el Gobierno contactó con el equipo de la UP para que transportaran a Ixnamiki Olinki hasta las zonas afectadas. El profesor Fernando Dávalos, el ex alumno Fernando Ochoa y los estudiantes David Alanis Medel, Daniel Arriaga y Gilberto Castañeda acudieron con el robot a la Ciudad de México junto con el convoy de apoyo enviado por el estado mexicano. Hasta la fecha, han conseguido salvar a dos personas en Morelos aunque, en los próximos días, sus labores de rescate también tendrán lugar en los otros estados afectados.
Además de transportar el robot a las zonas de riesgo y de difícil acceso en el centro de México, el equipo de la facultad de ingeniería ha enviado otros aparatos tecnológicos como un microsistema con paneles solares que propician seis horas de energía para las zonas sin servicio eléctrico. Para poder identificar si hay personas vivas, los estudiantes han llevado cámaras térmicas para cuerpos sólidos, con la que pueden ver si detrás de los muros hay un diferencial térmico.
Nuestro robot, Ixnamiki Olinki, va en camino para ayudar en labores de rescate. #FuerzaMéxico #OrgulloUP pic.twitter.com/Zl2BXnyjtD
— UP Aguascalientes (@UPbonaterra) 20 de septiembre de 2017
Ixnamiki Olinki concursó en el campeonato RoboCup 2017, y ganó el segundo premio en la categoría Major Rescue. En el proyecto han intervenido empresas nacionales e internacionales y director de la Facultad de Ingeniería de la UP Aguascalientes afirmó que ahora tienen el "doble compromiso moral de ayudar y de ponerlo a prueba".
La cooperación y las tareas de auxilio siguen en pie en México. La ayuda puede llegar de varias maneras, pero para Juan Carlos García Sánchez y su equipo de ingenieros, lo importante es utilizar la tecnología y los avances para centrar las ayudas en lo que realmente hace falta y comprometer los recursos para salvar vidas.