El Kirin 970 es el máximo exponente de las promesas que aún no pueden hacerse realidad.

Los teléfonos móviles son el eje de buena parte de las presentaciones tecnológicas de los últimos años. Ninguna compañía quiere quedarse atrás en un mercado que no deja de avanzar a pasos agigantados. Mientras que 2017 se ha visto envuelto por un protagonismo desmesurado hacia la reducción de los bordes en las pantallas de los terminales y las cámaras con doble lente, hay otra vertiente que comienza a hacerse fuerte y que marcará la pauta a seguir en los próximo años, sin embargo.

La aplicación de la inteligencia artificial en diferentes productos no es algo nuevo, pero es ahora cuando el salto pretende hacerse definitivo para la única pieza de tecnología que la gran mayoría de personas en el mundo desarrollado lleva encima de manera constante: el teléfono móvil.

Un smartphone más 'smart'

Aunque ya ha habido alguna que otra muestra anteriormente, es Huawei, el tercer fabricante de smartphones a nivel mundial en términos de volumen, la primera en querer llevarse el gato al agua de manera efectiva. El sábado presentaba durante la feria de la IFA su chip Kirin 970, el primero de su categoría en traer consigo una Neural Processing Unit (NPU) y que consigue aglutinar en apenas un centímetro cuadrado tecnologías que de otra manera requerirían chips separados, suponiendo un coste más elevado en términos de espacio y un peor desempeño.

Este chip, no obstante, no llega con efecto inmediato a ninguno de los teléfonos de la marca, sino que habrá que esperar hasta el lanzamiento de su flagship, el Mate 10, el próximo mes de octubre. Para entonces quizá ya no estén solos en este campo, pues hay dos SoC que también llegarán en este plazo de tiempo y que, si bien no se conoce mucho de ellos, podrían hacerle compañía al Kirin 970 en el campo de la inteligencia artificial.

Apple está trabajando en un nuevo «cerebro» para la inteligencia artificial

El primero de ellos es el A11, el chip que Apple debutará la próxima semana en su nueva generación de teléfonos y en el que, si se cumplen los pronósticos, también podría adquirir protagonismo la inteligencia artificial. El siguiente será el Qualcomm Snapdragon 836, que se dejará ver por vez primera también en el mes de octubre junto a los nuevos Pixel de Google.

Se avecina, por tanto, un final de año interesante para el mundo del móvil en general y para la aplicación de la inteligencia artificial en los dispositivos en particular. Apple, Google y Huawei pueden ser los primeros en contar con terminales pioneros en este aspecto. Cuál de ellos conseguirá una mejor implementación y funcionalidad en el día a día es algo que todavía está por ver.