Actualización 8 de junio, 15:40. La guerra del taxi se intensifica por todas las partes, y ahora es Cabify el que se encuentra en el punto de mira de todos. Por una vez no es Uber quien ocupa la primera plana. Por un lado, la startup española se encuentra batallando con el grupo político de Podemos a causa de unos comentarios que Cabify ha considerado fuera de lugar: según las investigaciones del grupo parlamentario, la startup estaría evitando, con un entramado financiero, el pago de impuestos en España.
Ahora, se suma un nuevo frente pero esta vez, de nuevo, con los taxistas. Concretamente de Fedetaxi que, a través de un comunicado, ha anunciado que mañana viernes interpondrá una denuncia contra Cabify ante la Fiscalía de delitos económicos. En este caso, el dilema no viene ni de la estructura financiera de la empresa, ni por las cuestiones de competencia desleal que se han venido arrastrando desde el día uno. Según la gremial del taxi, este paso viene directamente por el supuesto "entramado de sociedades" con las que la compañía española adquiere licencias VTC en el mercado primario, para después revenderlas a terceros. De esta forma, y en función de las bases de la demanda, la compañía consigue un rédito por la reventa de esos permisos aumentando su precio un 1.000%.
Las investigaciones de Fedetaxi apuntan a que el grupo de empresas que estarían "jugando" al alza con los precios de las, últimamente demasiado famosas, VTC estarían en torno a 20. Constituídas desde 2015, a través de las mismas "muchas de esas licencias cambiaron de mano dos y tres veces en la misma mañana", explican en el texto. Más allá del cambio de manos de las licencias, la gremial apunta a que todos estos movimientos, además de influir en el precio de los permisos, inculpen las normativas tributarias.
Toda esta polémica coincide, además, con el anuncio por parte del Ayuntamiento de Madrid confirmando que habrá 10.000 nuevas licencias VTC en juego próximamente. Justo lo que las protestas reiteradas del sector del taxi pedían que se controlase de forma inmediata. No está claro cuándo verán la luz estos permisos, pero muchos quedarán confirmados antes de final de año.
Ante esta situación, Cabify ha comunicado que "la transmisión de licencias VTC, al igual que sucede con la transmisión de licencias de taxi, debe ser conocida y autorizada por la Administración Pública para que tenga validez y despliegue a efectos jurídicos". Añadiendo que, teniendo en cuenta este dato, carece de sentido sostener que Cabify traslada el importe de las licencias VTC a los usuarios de la Aplicación, puesto que dichas licencias no son operadas por la compañía, sino por las empresas VTC con las que colabora. Para la startup española, la acusación de controlar un entramado de empresas y sociedades carece de fundamento y" no existe indicio alguno de ilegalidad que justifique la iniciación de ningún procedimiento por tales motivos". Exige a Fedetaxi, de esta manera, que cese su campaña difamatoria.