En 2012, Samsung fue una de las primeras compañías en apostar por el stylus (S-Pen) en tablets como punto diferenciador de productividad, llevándola a la Samsung Galaxy Note 10.1 después de su debut en el Galaxy Note original. Es una apuesta que luego se ha consolidado en sus nuevos modelos, tanto en tablets con Android como convertibles con Windows. Sin embargo, hasta ahora el S-Pen no formaba parte de gama de portátiles tradicionales y, dadas sus características, es un hecho que tenía sentido. Todo ha cambiado con el Samsung Notebook 9 Pro.
El nuevo portátil de la compañía no sólo trae el S-Pen integrado en su cuerpo como los Galaxy Note. El hecho que le da valor es que la bisagra permite a la pantalla rotar 360 grados, con lo que la experiencia de anotación y dibujado mejora exponencialmente. En la línea de la Tab S3, el S-Pen que acompaña al Notebook 9 Pro incluye 4000 niveles de presión, y como sus competidores, permite ser inclinado para sombrear.
Además de aprovecharse de las novedades de Windows Ink presentes en la Creators Update, como una regla mejorada o la llegada de Paint 3D, Samsung incorpora aquí aplicaciones propias como Air Command que permiten anotación sobre capturas de pantalla, dibujo de letras para reconocimiento de texto, etc. Es, sin duda, valor añadido respecto a marcas que se limitan a incluir las herramientas del sistema.