Tesla ha retirado 53.000 unidades de sus coches autónomos Model S y Model X fabricados entre febrero y octubre de 2016 por un posible fallo de fabricación relacionado con los frenos de estacionamiento.
Este tipo de frenos, fabricados por la conocida multinacional Brembo, aseguran los vehículos cuando se estacionan y el fallo de fabricación radica en su engranaje, el cual podría fracturarse. En ese caso, el freno de estacionamiento no podría soltarse y el vehículo no podría moverse del estacionamiento. Tesla estima que alrededor del 2% de los vehículos fabricados de febrero a octubre del año pasado puede contener fallos de fabricación, y han decidido retirar los vehículos de manera preventiva para mejorar la posible falla.
El error en el engranaje no tiene ninguna relación con los frenos tradicionales de los coches autónomos de Tesla, por lo que la seguridad de los conductores no corre peligro en ningún momento. En un comunicado, la empresa de Elon Musk explicó:
No creemos que este problema pueda conducir a un fallo de seguridad para nuestros clientes, y no hemos visto un solo accidente o lesión relacionada con él. Sin embargo, para ser excesivamente cautelosos, vamos a reemplazar proactivamente estas partes para asegurarnos de que no surjan problemas.
Los usuarios de los vehículos afectados recibirán una notificación para que acudan al taller y se remplace la pieza, una labor que no lleva más de 45 minutos. Sin embargo, Tesla estima que el proceso se extienda hasta octubre de este año, cuando Brmeba proporcione las piezas necesarias para el remplazo de los 53.000 vehículos.
Brembo, la empresa italiana contratado por Tesla para la fabricación del freno de estacionamiento, está especializada en fabricar discos de freno para automóviles de lujo y motocicletas. Entre sus clientes se encuentra Ferrari, la escudería que utiliza sus productos para Fórmula 1, BMW, KTM o Ducati.
El fabricante de coches autónomos se convirtió este mes de abril en el fabricante de automóviles más valioso de Estados Unidos, por encima de las gigantes General Motors y Ford.