Los coches autónomos son la tendencia en la que quieren participar todas las tecnológicas, tanto que a día de hoy, y exceptuando Apple de la que no se conocen más que rumores, todas han mostrado sus intenciones, de una forma u otra, de entrar en este mercado que está llamado a ser el futuro de la automoción. Nvidia y Audi están trabajando en su propia tecnología, Ford ya tiene sus conceptos operativos y Tesla... bueno, Tesla ya tiene su coche semi autónomo en la calle.
Ahora Intel ha anunciado la compra de Mobileye, precisamente, para darlo todo en la carrera del coche autónomo. ¿El montante? 15.000 millones de dólares por hacerse con la tecnología de coche autónomo, un acuerdo que llega después de que el otoño pasado, las dos compañías acordasen una colaboración mediante la cual Intel proporcionaría chips especializados para los sistemas anticolisión automáticos de Mobileye.
De hecho, ambas compañía llevaban desde enero colaborando con BMW para convertir 40 vehículos en autónomos para la segunda mitad de 2017, por lo que el acercamiento entre ambas, y la actual compra, vistas la sinergías que tanto Intel como Mobileye han venido generando en el pasado, no ha pillado al mercado desprevenido.
La compra permitirá a Intel competir de tú a tú con Qualcomm y Nvidia, que hasta ahora han sido los fabricantes de chips que más han apostado por el autónomo, una compra que supera en más de cinco mil millones de dólares la valoración de Mobileye y que va poner a Intel en el centro de la pugna por los fabricantes del próximo cerebro del coche autónomo.
