Dos días después de su presentación, algunos medios ya están probando en profundidad el Galaxy S8... y están apareciendo algunos problemas. Por ejemplo, el de la fiabilidad del reconocimiento facial, que ha sido sorteado de la forma más simple: utilizando una foto del propietario en otro terminal frente a la cámara frontal, valga la redundancia. Es lo que ha ocurrido con Marcianophone, quien publicó un Periscope demostrándolo. En ArsTechnica se han hecho eco de ello.

No es el único caso, otro usuario ha reportado exactamente el mismo suceso, esta vez a través de un vídeo en YouTube.

YouTube video

Samsung tiene a su favor que, como ha avisado, los dispositivos de pruebas no tienen un software final, y de hecho suele modificarse y pulirse antes de su lanzamiento comercial, previsto para dentro de menos de un mes. De todas formas, esta vulnerabilidad es una vieja conocida: desde que Android implementase el desbloqueo por reconocimiento facial en 2011 se conoció este fallo de seguridad, evitable con el uso de una cámara dual o con capacidades 3D que pueda reconocer la profundidad del objeto, evitando así que pueda ocurrir este engaño.

Hace un par de años, en la presentación del S6, ocurrió algo parecido con nuestro compañero Antonio Sabán, que tuvo problemas similares con el reconocimiento dactilar.

También tiene a su favor que es el único método biométrico de seguridad mediante el cual no es posible utilizar Samsung Pay. Ahora Samsung tiene un mes para demostrar que el software final no tiene este problema de seguridad. Mientras esto no ocurra, desaconsejamos utilizar este método de seguridad para la pantalla de bloqueo.