Uber empuja las cosas hasta que suceden. Su estrategia es siempre la misma: entrar a operar en docenas de ciudades sin autorización ni regularización, transformar agresivamente al mercado y finalmente hacer que las cosas cambien. El modus operandi Uber está de nuevo en acción buscando hacer un cambio sustancial en la adopción de los vehículos autónomos en las ciudades.

El 14 de diciembre la ciudad de San Francisco fue el primer campo de pruebas real para el transporte de pasajeros en vehículos sin conductor. Sin embargo, debido a que los coches de Uber no habían obtenido los permisos del Departamento de Vehículos Motorizados de California para hacerlo, el Gobierno californiano amenazó con multar a la empresa.

De acuerdo con Reuters, Uber ha anunciado que esta mañana los vehículos autónomos de la empresa ya han sido retirados de California y transportados a Arizona, donde continuarán probándolos con pasajeros y destinos reales. Por su parte, Doug Ducey, gobernador de Arizona ha dicho que recibirán los vehículos autónomos de Uber "con los brazos abiertos."

En la página web de Doucey detalla:

California pone frenos en la innovación y el cambio con más burocracia y regulación, mientras Arizona está poniendo el pavimento para la nueva tecnología y los nuevos negocios.