La telenovela de Zetta es un no acabar. No tanto por la polémica -que ya ha saltado a la opinión pública general de forma bastante notoria-, más bien por la alegría con la que uno de sus fundadores y cabeza visible justifica uno de los engaños y presunta estafa más sonados del mundo tecnológico español desde el fatídico caso Gowex. Ahora, con la relativa calma tras la tormenta, los responsables de Zetta hecho una serie de declaraciones a Espejo Público y no tiene desperdicio, puesto que viene a demostrar una cosa: los responsables de Zetta sigue cautivos en un mundo de fantasía y color.

De todo lo que se puede leer en la entrevista hay algunas declaraciones que no tienen ningún desperdicio, tanto por exageradas como por directamente falsas, un mantra que por mucho que los responsables de la compañía repitan, no se convertirá en verdad. Zetta no tenía su propia marca de smartphones en base a especificaciones a carta o utilizaba el rebranding legítimo: simplemente ponía pegatinas encima de móviles de otros fabricantes y aumentaba considerablemente el precio de venta final.

Hacer el movimiento de tener una marca propia de móviles no es tan fácil como parece, por logística y por capital. Es algo mucho más complicado como para que los responsables de Zetta metan en el mismo saco a las empresas legítimas que han hecho de ese movimiento su modelo de negocio legítimo. De hecho en Hipertextual ya os hemos contado cómo uno puede ser propietario de su propia marca de smartphones. Zetta apunta que no es lo mismo y que no hacen nada ilegal porque modifican el software:

"El trabajo sobre el móvil es porque hay una implantación de software. - Declaración de los responsables de Zetta a Espejo Público

Todo ello mientras Xiaomi ha confirmado que no tiene ninguna relación comercial con Zetta. Una declaraciones totalmente alejadas de la realidad contrastada por diversas fuentes que precisamente confirman que ni había autorización y que ocultaban la marca china intencionalmente con una pegatina ante la imposibilidad de borrarla definitivamente sin dañar el terminal.

"Todo está registrado. Tenemos autorización para hacer modificaciones. Está en disposición de consumo de la junta de Extremadura. No tenemos nada que ocultar. Lo raro sería que borráramos la marca china y pusiéramos la nuestra."- Declaración de los responsables de Zetta a Espejo Público

Pero desde luego eso no es lo más grave. ¿El problema? Utilizan un fork de Android cuya licencia permite la modificación siempre y cuando esté bajos los términos de su licencia, pero impide su uso de forma comercial sin autorización del propietario, pues Cyanogen está bajo la licencia de Reconocimiento-No Comercial-Compartir Igual.

El usuario no puede eludir o desactivar cualquier sistema de protección de contenidos o de la tecnología de gestión de derechos digitales utilizado con cualquier servicio de Cyanogen; descompilar, realizar ingeniería inversa, desmontar o reducir cualquier servicio de Cyanogen. Términos de uso de Cyanogen

Comparemos los términos de uso anteriores con las declaraciones de los responsables de Zetta a El Mundo:

"Las modificaciones del software lo hacen nuestro. Cuando se hace una modificación, lo haces tuyo". - Declaración de los responsables de Zetta a Espejo Público

Con todo, hay algo en lo que sí tiene razón los responsables de Zetta. Bueno, hasta que la prensa y los usuarios descubren el pastel:

"No es posible fabricar un teléfono en Extremadura" - Declaración de los responsables de Zetta a Espejo Público

Además según confirman al mismo medio, "Ellos han hecho el diseño de la carcasa y el logotipo". Parece que tampoco. Vergonzoso y caradura, se queda corto.

Con un “lo siento mucho. Me he equivocado y no volverá a ocurrir”, que también es muy español y muchos españoles, nos hubiesemos conformado.

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