Hoy hablamos del Reino de Tailandia, alias Siam. Ahí donde se filmó la famosa película «La Playa» de Leonardo Di Caprio. El país que ama el amarillo, las sonrisas y valora el nueve como el número de la suerte, exploremos sus curiosidades. Esta vez sólo nueve, para no contradecir la tradición.
En anteriores ediciones: Rusia, Japón, China y Corea del Sur.
Yo estaba aquí primero
En Tailandia tienen un mercado sobre las vías de un tren, que funciona. Ocho veces al día una locomotora atraviesa el pueblo tailandés de Mae Klong, a una hora de Bangkok, justo por encima del mercado local. El mercado ocupa unos 200 metros de largo y estaba ahí antes de que pusieran las vías. Los comerciantes decidieron que no tenían que irse, sólo dejarlo pasar. Por tanto, a las horas que pasa el tren, suena una bocina y todos los vendedores pliegan sus toldos y mercancías para dejar el espacio justo a la locomotora y después lo vuelven a montar. Aquí puede verse en movimiento.
Love is love
Tailandia es un país muy abierto y tolerante con respecto a la comunidad LGTB, al menos en lo que respecta a la aceptación social. Sin embargo, aunque no hay una ley contra la homosexualidad, tampoco las hay a su vez que apoyen y protejan a la comunidad LGTB. El matrimonio entre personas del mismo sexo no está permitido ni reconocido, son meramente parejas de hecho. Tampoco pueden adoptar y las personas transexuales siguen siendo identificadas con su sexo de nacimiento en sus pasaportes. Por tanto, sí es verdad que uno de cada 166 hombres en Tailandia es «_kathoey_» a.k.a transexual, frente a los uno de cada 2.500 de por ejemplo USA, pero a la igualdad total todavía le queda camino.
Corrections Museum
El Museo del Correccional de Bangkok está situado donde anteriormente había una antigua cárcel de máxima seguridad. Actualmente es un parque, llamado Romaninat o «_suan kook kao_» en tailandés, pero aún se puede ver parte del muro y algunas de las torres de la antigua cárcel. El museo expone los diferentes métodos de tortura utilizados en la antigüedad para la ejecución de la pena de muerte en Tailandia. Por cierto, la pena de muerte aún está vigente. Las torturas por suerte dejaron de ser legales en 1902.
Había que resumirlo
Bangkok en realidad no se llama Bangkok sino que es un resumen del nombre original que es: «_กรุงเทพมหานคร อมรรัตนโกสินทร์ มหินทรายุธยา มหาดิลกภพ นพรัตนราชธานีบูรีรมย์ อุดมราชนิเวศน์มหาสถาน อมรพิมานอวตารสถิต สักกะทัตติยวิษณุกรรมประสิทธิ์_», transcrito suena algo así como: «_Krungthepmahanakhon amonrattanakosin mahintharayutthaya mahadilokphop noppharatratchathaniburirom udomratchaniwetmahasathan amonphimanawatansathit sakkathattiyawitsanukamprasit_», y significa literalmente: «ciudad de ángeles, la gran ciudad, la ciudad de joya eterna, la ciudad impenetrable del dios Indra, la magnífica capital del mundo dotada con nueve gemas preciosas, la ciudad feliz, que abunda en un colosal palacio real que se asemeja al domicilio divino donde reinan los dioses reencarnados, una ciudad brindada por Indra y construida por Vishnukam». Aquí puedes ver a un nativo pronunciándolo al completo para que veas que no me he inventado el sonido.
El rey
Igual suavicé la adoración que le tienen un poquito.
El Rey de Tailandia, Bhumibol Adulyadej, es el monarca vivo que lleva más años reinando, 70 años. Es bastante venerado, se le conoce como «El Grandioso», y cometer lèse majesté, es decir, ofender a su majestad, cualquier miembro de su familia o sus símbolos oficiales, está penado con hasta 15 años de prisión.
Con sus símbolos me refiero a que, por ejemplo, es ilegal pisar billetes o monedas sólo porque tienen la imagen del rey o que, además, el himno suena dos veces por día en los lugares públicos como en trenes y parques, y los tailandeses han de detener lo que sea que estén haciendo para tomar posición militar hasta que el himno termina porque no mostrar respeto al himno también entra en el concepto lesa majestad.
Los _Tuk-tuk_
Hacen un servicio similar a los taxis y se llaman «_tuk-tuk_» por el sonido que hace el motor. En verdad hay en muchos países de Asia como Bangladés, Filipinas, Camboya, India, Nepal, Laos... entre muchos otros. Todos son variantes de _autorickshaw_ pero se les conoce con distintos nombres locales: _ricksha, tuk-tuk, tuctuc, mototaxi_, ect. Siempre es un triciclo motorizado, que viene a ser la versión moderna del tradicional _rickshaw_ (carro de dos ruedas tirado por una persona) y del _velotaxi_ (vehículo de tres ruedas impulsado a pedal).
Por cierto y relacionado, los coches, aunque no es aplicable a los tuk-tuk ya que el conductor de cualquier triciclo va en el centro, tienen el volante del lado derecho pero en el país se maneja por la izquierda.
La comida
Los tailandeses comen mucho, un hecho muy indicativo de esto es que en Tailandia no se te saluda diciendo ¿cómo estás?, sino literalmente con un ¿ya comiste? Por la calle hay puestos de todo tipo de comida y hay que decir que en general, la comida tailandesa es muy rica. Se caracteriza por mezclar muchos sabores: dulces con salados con agrios y con picantes, creando mezclas exóticas para el paladar. Quizás el máxime inconveniente es que cuando digo picante, es que si te da por pedir algo que tiene picante, picará mucho, verdaderamente mucho. No hagas caso si te dicen que «pica sólo un poco», para un occidental eso significa que le caerán las lágrimas del picor.
Sin embargo, esta sección se caracteriza por sacar a la luz lo más raro de lo raro y cierto es que existen los «grillos verdes a la tailandesa» donde estos insectos se cocinan hasta que están crujientes y se sirven con curry. También se comen lagartijas fritas. O, por ejemplo, tienen la costumbre de comer los camarones crudos, del agua directamente a la boca, masticándolos deprisa para que dejen de moverse. Espero sinceramente que esto no te haya quitado las ganas de seguir encargando comida a tu restaurante tailandés favorito. Y me remito a insistir, la gran mayoría de la comida tailandesa es muy normal y está muy buena.
Normas de etiqueta
Hablando de la comida, se come con palillos o con un tenedor y una cuchara, depende del plato. La cuchara se usa como tenedor y el tenedor como cuchillo (para empujar la comida sobre la cuchara) y les parece de muy mala educación poner un tenedor en la boca, hay que tener cuidado con eso. Además, no son como los otros países asiáticos donde los palillos se usan por defecto. Hay platos que se comen con palillos (como los fideos por ejemplo) y otros que no, como los platos tradicionales importantes; estos se comen únicamente con tenedores y cucharas, si usas los palillos para ellos, piensan que los estás confundiendo con chinos y los ofendes.
Supersticiones
Por ejemplo, si vas a Tailandia te extrañará ver que en los edificios el piso 13 es casi inexistente, por oficial que sea dicho edificio. Después del 12 viene el 12B. En contraposición al número que da mala suerte, se supone que el 9 trae la buena.
También están seguros de que los tatuajes «_roi sak_» otorgan poderes a quienes los llevan. Estos normalmente se hacen en los templos a manos de los monjes, sin máquina, directamente con una aguja empapada en tinta y posteriormente te los «activan». Lo normal es tatuarse _totems_ de animales y «frases de poder» en la antigua lengua «_khom_», la usada antiguamente en Camboya.
En cosas más actuales, dan bastante importancia al número de móvil que se tiene. Hay que evitar los trece claro y es genial tener nueves y capicúas. Esto es una cosa curiosa en cualquier sitio, estamos de acuerdo; sin embargo, allí la gente se cambia el número y también paga para tener otro que aporte más suerte. Los números originales o fáciles de recordar pueden llegar a los 10000€ (no me he pasado con los ceros).
Esta es la razón por la que esta edición sólo va a tener 9 curiosidades, hay que ser consecuentes con el país ¿verdad? Os deseo suerte.
