Evitar accidentes es la mayor preocupación de los fabricantes de coches. Crear vehículos rápidos, potentes y divertidos es fantástico, pero hacerlos seguros es otro cantar, y gracias a la tecnología no solo podemos beneficiarnos de los últimos avances en materia de diseño, eficiencia o entretenimiento sino también a nivel de seguridad, la prioridad número uno.
Ford tiene en su amplio catálogo de equipamiento tanto de serie como opcional numerosos dispositivos enfocados directa o indirectamente a evitar accidentes:
Control de velocidad adaptativo
El control de velocidad adaptativo lleva entre nosotros muchos años pero sigue siendo la estrella a la hora de evitar accidentes por alcance y despistes en autovías. El conductor elige la velocidad que quiere que el coche mantenga y la distancia mínima de seguridad. Si la medición que realiza un sensor radar detecta que la distancia con el coche que nos precede es inferior a la marcada o a la mínima que contempla el sistema, reducirá la velocidad del coche para mantener la distancia de seguridad, una vez se pueda volver a aumentar la distancia de seguridad se incrementará progresivamente la velocidad hasta llegar a la marcada por el conductor.
Esta tecnología no es capaz de detener el coche por si solo en caso de un frenazo de emergencia, a diferencia del Active City Stop que veremos más adelante, pero la diferencia entre tener un accidente a 120 km/h o tenerlo a 60 km/h muchas veces supone la diferencia entre la vida o la muerte. Es por eso, que el control de velocidad adaptativo es una tecnología fundamental para evitar accidentes graves y minimizar sus consecuencias.
Limitador Inteligente de Velocidad
Como una evolución del control de velocidad adaptativo se encuentra el asistente inteligente de velocidad (ISA). Este sistema añade el reconocimiento de las señales de tráfico y detecta automáticamente el límite de velocidad correspondiente si el conductor lo activa. En muchas ocasiones un exceso de velocidad es el culpable del accidente, porque entramos en una zona con menos visibilidad, con curvas algo más cerradas o por un simple cambio de rasante, etc.
Este limitador inteligente se puede configurar en tramos de 5 km/h hasta los 200 km/h.
Cuando se acercan este tipo de obstáculos es habitual que la velocidad máxima de la vía descienda y este sistema se adapta de forma automática, por lo que se reducen de forma drástica los accidentes a velocidades excesivas. El Limitador Inteligente de Velocidad permite a los conductores mantener una tolerancia de velocidad de hasta 10 km/h por encima del límite de velocidad detectado. Es importante recalcar que el sistema no acelera y frena de forma continuada al coche sino que controla la fuerza del motor ajustando la cantidad de combustible que le suministra.
El Limitador Inteligente de Velocidad también emplea los datos del navegador de abordo, en caso de que el vehículo lo tenga instalado, para emplear los datos de los mapas y así tener una mayor precisión.
Sistema de ayuda para permanecer en el carril
¿Cuántos accidentes se podrían evitar si el coche fuera capaz de impedir que te salgas del carril? Exacto, un gran número de ellos. Precisamente este es el objetivo del sistema de mantenimiento de carril que hemos probado en varias ocasiones y que se convierte en una opción que siempre acaba activada. La tecnología está diseñada para carreteras con varios carriles (como autopistas), de modo que se desactiva automáticamente a velocidades inferiores a 65 km/h o puede desactivarse manualmente. Es importante saber que si activas el intermitente para cambiar de carril el sistema se desactiva temporalmente.
Esta tecnología para evitar accidentes se puede configurar de dos formas: como un aviso, o con asistencia completa capaz de colocar y enderezar el coche de nuevo en el carril. No es un sistema de conducción autónoma porque no puedes soltar las manos del volante siempre, pero se asemeja a ese interés de Ford por introducir tecnologías que nos hagan la conducción más fácil y segura.
Control para el arranque en pendiente
No solo hablamos de evitar accidentes graves sino también pequeños toques como los que a veces se producen al salir en una cuesta arriba y el coche que está tras nosotros se encuentra muy pegado. Con este sistema el coche no se cae unos centímetros cuando queremos salir en cuesta, y podemos evitar estos pequeños accidentes que a veces pueden ocasionar visibles desperfectos en el coche e incluso alguna lesión cervical si el impacto es fuerte.
El funcionamiento del sistema es muy sencillo y útil. Una vez el conductor está parado en pendiente y debe iniciar el movimiento, el vehículo activa los frenos durante un par de segundos para no caer atrás y que nos de tiempo a pisar el pedal del acelerador para así avanzar.
ESP, el ángel de la guarda de muchos conductores
Todos los coches de Ford están equipados con un programa de estabilidad electrónica basado en sensores que detectan cualquier cambio brusco en la dirección, los frenos o en el propio comportamiento del coche que puedan provocar un accidente por la pérdida de control del vehículo. El ESP ajusta la velocidad de cada rueda para impedir que derrape y por tanto mantiene la estabilidad de la trazada.
Detección de accidentes por alcance
El sistema Active City Stop evita o reduce las colisiones por alcance a baja-media velocidad con el vehículo que tenemos delante es una de las últimas innovaciones en materia de seguridad de Ford.
La tecnología de Active City Stop conformada por un radar situado en la parte superior de nuestro parabrisas, explora el área delante del vehículo para detectar posibles obstáculos. En la última versión del sistema, que fue incluido en la mayoría de los modelos de la marca, se ha aumentado la velocidad de operación de los 30km/h hasta los 50km/h.
Su funcionamiento es bastante complejo internamente, ya que recarga los frenos, y si el conductor no actúa, se reduce automáticamente el par motor y acciona los frenos para evitar o reducir la severidad del impacto de las colisiones. Además, es lo suficientemente inteligente para entender en milésimas de segundo que el conductor ha maniobrado con el volante para salvar la situación, con lo que desactiva automáticamente su sistema de frenado.
Luces autoadaptables
La conducción nocturna suele ser muy delicada porque la visibilidad en carreteras no iluminadas se reduce considerablemente. Aquí entra en juego la capacidad lumínica del vehículo. La tecnología LED dinámica de Ford es capaz de ajustar el patrón de iluminación de los faros en función de la velocidad, el entorno y las condiciones.
El sistema de luces largas que no deslumbran utiliza una cámara instalada en el parabrisas para detectar los faros delanteros o traseros de otros vehículos y bicicletas a una distancia de hasta 800 metros por la noche, y utiliza faros especialmente desarrollados para eliminar la luz que podría cegar temporalmente a otros conductores o ciclistas. Una tecnología que ya está disponible en los nuevos S-MAX, Galaxy y Edge.
El sistema contempla hasta ocho tipo de situaciones para abordar escenarios tanto en ciudad, mal tiempo o en carreteras secundarias. Además, la luz de intermitencia ahora emplea unas bandas LED que se iluminan indicando la dirección del cambio de una forma más gráfica y fluida.
BLIS
Relacionado con la importancia de la visibilidad se encuentra el sistema de información del ángulo muerto (BLIS), que te ayuda a cambiar de carril con más seguridad ya que si se encuentra un coche en tu ángulo de visión perdida te avisará con una indicación naranja en el retrovisor para mostrar que tienes un objeto que probablemente no veas.
Completa visión tras las esquinas
La tecnología de Cámara de Visión Delantera de Pantalla Partida, disponible actualmente en los nuevos modelos de Ford S-Max y Galaxy, así como también estará nuevo Ford Edge, es clave para evitar accidentes con peatones en ciudad.
Por medio de una cámara, autolimpiable, situada en la parrilla delantera del vehículo, el conductor tendrá una visión de 180º grados de lo que pasa en las esquinas que se encuentre de frente, eliminando las zonas ciegas y otras con una visibilidad reducida.
Asistente de Precolisión con Detección de Peatones
El Asistente de Precolisión con Detección de Peatones de Ford se encarga de detectar la presencia de un peatón, animal o niño en ciudad que puedan cruzarse por delante del vehículo. El sistema actúa de forma inmediata mejorando la respuesta del frenado al reducir de forma brusca la brecha entre las pastillas de freno y los discos siempre y cuando el conductor no responde a los potentes avisos acústicos y visuales mediante una franja de luces LED rojas que se proyectan en el cristal delantero. Esta tecnología se nutre de la información recopilada por una cámara instalada en el parabrisas y un radar instalado en el parachoques, y la cruza con una base de datos de anatomía de personas para distinguir a la gente de los típicos objetos y elementos presentes en la carretera.
Sistema de alerta de cansancio
En muchas ocasiones no nos damos cuenta del cansancio, muchas horas conduciendo en un viaje o bien la vuelta a casa tras una larga jornada provocan que nuestra capacidad de atención pueda verse reducidas. El sistema de alerta de cansancio de Ford controla constantemente el comportamiento del conductor y ante el más mínimo cambio que pueda estar causado por la fatiga aparecerá un aviso que sugiere tomar un descanso. Si el nivel de alerta se incrementa comenzaremos a escuchar un potente aviso sonoro.