Hace algunos meses explicábamos la tecnología que permitió que los discos de estado sólido (SSD) superasen en capacidad a los discos duros (HDD) mecánicos tradicionales. El secreto estaba en que Samsung comenzó a producir chips NAND de 256 Gbit, chips que en el momento de su presentación eran el doble de densos en lo que a capacidad se refiere. La tecnología detrás de ello eran 48 capas de memoria con 3 bits por celda. Ahora, finalmente, Samsung ya comercializa el SSD de 16 TB PM1633a. Lo mejor de todo es cómo hemos pasado de varios terabytes en HDDs de 3.5" a los 16TB de este SSD que no necesitan alimentación externa y que caben en la palma de la mano.

Según Samsung, están usando 512 chips de 256GB de V-NAND, que ya vimos en su SSD portátil, renovado en el CES. Para hacerlo un producto que realmente pueda usar cualquier profesional, han mejorado la fiabilidad, prometiendo que cada día podremos escribir sus 15.36 TB de capacidad real sin fallos. Los discos SSD estándar, basados en MLC y TLC NAND, por ejemplo, pueden ser escritos entre 2 y 10 veces menos. Que exista una cifra quiere decir que sigue sin ser perfecto, pero ya se puede confiar perfectamente para mover grandes cantidades de datos.

El modelo de 16TB es el más grande de la gama, pero dentro de la línea de SSD PM133a tenemos otros menores -aunque tampoco desdeñables- como 7.68TB, 3.84TB, 1.92TB y pasando a los gigabytes, 480GB y 960GB. Todos ellos dan velocidades de hasta 1200 MB/s en lectura y escritura secuencial. Para hacernos una idea de su superioridad sobre un HDD, el rendimiento en IOPS en lectura aleatoria de este SSD es 1000 veces más alto.

En cuanto al precio, no podemos hablar de una cifra, ya que Samsung aún no las ha proporcionado para ningún modelo de la gama, pero dado que están orientados a profesionales y estrenan tecnologías, es seguro hablar de que costarán varios miles de euros o dólares. Es el precio de ser early-adopter en soluciones profesionales.