Fin de drama de Apple y del asunto de los libros electrónicos. El Tribunal Supremo ha dado carpetazo al asunto y ha impuesto a Apple el pago de los 450 millones de dólares acordados anteriormente, por considerar cosa probada que la compañía fijó el precio de los libros disponibles a través de la iBooks Store en su propio interés.
En este caso, los jueces rechazaron la apelación por parte de Apple, dejando intacto el fallo del tribunal de apelaciones a favor del Departamento de Justicia de Estados Unidos y de los más de 30 estados que presentaron la demanda de forma conjunta, por lo que esto supone que directamente Apple tendrá que pagar la cantidad fijada anteriormente.
El acuerdo previo, que al que se vuelve tras el fallo en el supremo es el pago de 400 millones de dólares de forma directa a los consumidores afectadas por la fijación de los ebooks, otros 20 millones de dólares adicionales a los estados que se sumaron a la demanda y otros 30 millones de dólares en honorarios legales derivados de este proceso que tiene ya casi tres años.
Apple argumenta que la llegada de sus libros trajo consigo más competencia al mercado
No obstante, Apple argumentó que sus acciones mejoran la competencia proporcionando a los consumidores una nueva plataforma de ebooks, aunque el tribunal lógicamente no lo ha visto así, achacando que gracias a llegada de la tienda de libros de Apple el precio general de los ebooks ha caídos estos últimos años.
Con todo, el asunto está más que cerrado por el momento, y lo cierto es que es buena noticia para Apple ahora que podrá fijar sus esfuerzos legales en el otro asunto mucho más importante que tiene entre manos.