El nominado a los Oscar y a los Globos Oro, Will Smith, y el ganador al Oscar honorario a su trayectoria, Spike Lee, han confirmado que no asistirán a la gala de entrega de los 88 Premios Oscar, en protesta ante la falta de diversidad en la Academia, una polémica que esta edición está tomando tintes mucho más serios, sobre todo con el rechazo de todo tipo de personalidades de renombre en la industria hacia una de las instituciones del cine más importantes del mundo, compuesta en un 77% por hombres y apenas un 2% de los cuales son de raza negra o latinos, tal como se han hecho eco en Las Horas Perdidas.
En el caso de Spike Lee, ha anunciado en Instagram que ni él ni su esposa, Tonya Lewis, irán a la gala por la ausencia de nominados de raza negra.
“No podemos respaldar esta gala. No queremos faltar al respeto ni su presentador, Chris Rock, ni al productor, Reginald Hudlin, ni a la presidenta de la Academia, Cheryl Boone Isaacs, pero ¿cómo es posible que por segundo año consecutivo los 20 contendientes a los premios a las mejores interpretaciones sean blancos?”
Por otro lado, Will Smith, uno de los actores más populares del cine y TV en los Estados Unidos, también ha confirmado en una entrevista que ni él su esposa acudirán a la gala por la misma razón: "en estos momentos nos sentimos incómodos con la idea de estar ahí y decir 'esto es lo correcto'":
