El primer ministro malayo ha confirmado públicamente que los restos encontrados el pasado treinta de julio en la Isla de la Reunión pertenecen al Boeing 777 de Malaysia Airlines desaparecido durante el mes de marzo de 2014. Dicho vuelo cubría la ruta Kuala Lumpur - Pekín, y, desde su despegue hace más de un año, no se volvieron a tener noticias ni del propio avión ni de las 239 personas a bordo del mismo.
"Un equipo internacional de expertos ha confirmado de manera concluyente que los restos del avión encontrados en la Isla de Reunión pertenecen en realidad al vuelo MH370", anunciaba el Primer Ministro Najib Razak en una conferencia televisiva durante el miércoles cinco de agosto. "Ahora tenemos evidencias físicas de que el vuelo MH370 acabó trágicamente en el Océano Índico meridional", sentenciaba.
El descubrimiento del flap abre un nuevo capítulo en la investigación
Las hipótesis que se barajaban y se barajan son múltiples: secuestro del avión, derribo militar, accidente... Pero la falta de pruebas físicas ha dificultado el proceso de investigación desde el día uno, llegando a una situación de estanque casi total. No obstante, con el descubrimiento de este flap –una de las partes del ala del avión empleadas en el despegue y en el aterrizaje– perteneciente al Boeing 777 de Malaysia Airlines, se abre un nuevo capítulo en la investigación. La zona de búsqueda ahora se reduce considerablemente, aunque, considerando la lejanía temporal de los sucesos, la dificultad de la investigación sigue siendo bastante elevada, tal y como afirman diversos expertos en aviación y seguridad.
Una de las mayores incógnitas por resolver ahora mismo por los expertos es qué ocurrió para que el vuelo MH370 se desviara de su ruta prevista hasta acabar algunos restos en la Isla de la Reunión. Las teorías, nuevamente, son muy diversas. La que más fuerza ha ido cobrando durante lo últimos meses es que el vuelo MH370 se quedó sin combustible y acabó estrellándose en el Océano Índico a una distancia de unas 25 millas náuticas del último ping obtenido por los satélites. No obstante, las autoridades y los comités de investigación aún no han alcanzado una conclusión válida por lo que también se mantienen abiertas otras opciones como un fallo mecánico o el secuestro, que fue la que más validez cobró durante los primeros meses de investigación.
El siguiente paso es encontrar más piezas del Boeing 777 que operaba el vuelo MH370, como por ejemplo las cajas negras, las cuales podrían ser el rayo iluminador que aclare lo sucedido aquel fatídico día de marzo de 2014.