Existen pocos monstruos más grandes que una galaxia en el universo. Las galaxias contienen toda la materia que conocemos en nuestro día a día: planetas, estrellas, asteroides e incluso objetos tan raros como los agujeros negros. Fuera de las galaxias lo que hay es, mayormente, vacío. Pero hasta estos titanes tienen un final. La muerte de las galaxias es un evento hasta ahora bastante misterioso. Pero los investigadores han conseguido resolver las causas de la muerte, al menos en parte. La muerte de una galaxia podría deberse al estrangulamiento. ¿Y cómo se puede estrangular a una masa tan gigantesca y poderosa, en mitad del espacio? Las investigaciones todavía tratan de esclarecer los hechos y los antecedentes, pero parece que la escena del crimen, al menos, ya está clara.

Qué es una galaxia muerta

Los investigadores dividen las galaxias en vivas y muertas. Este estatus depende, básicamente, del si contienen gas y pueden formar estrellas o no. Las galaxias muertas han perdido la gran mayoría del gas frío y son incapaces de formar nuevos cuerpos estelares, por lo que no evolucionan en este sentido. El gas, principalmente hidrógeno, es necesario para la formación de nuevas estrellas. Básicamente, una nube de gas frío se va concentrando, aumentando la masa y, por tanto, la gravedad, lo que hace que el gas se vaya concentrando hasta obtener una presión y una masa tan considerable que el hidrógeno, sencillamente, se enciende. De nube de gas, la bola pasa Una galaxia muerta sigue conteniendo estrellas y sistemas, pero no forma nuevos solesser una proto-estrella que irá creciendo hasta alcanzar su tamaño final. Existen numerosos factores que intervienen en el nacimiento de una estrella.

Y entre ellos se encuentra la presencia fundamental de gas. Sin este, simplemente, no se puede crear una estrella nueva. Cuando no se crean nuevas estrellas, como decíamos, la galaxia se considera muerta. Eso no quiere decir que la galaxia no contenga soles y sistemas activos. Tampoco hace referencia alguna a la vida en dichos sistemas. Hablamos de términos astronómicos que comparan la evolución galáctica. La muerte de las galaxias solo quiere decir que éstas no seguirán desarrollando nuevos sistemas y, por lo tanto, su composición y desarrollo a nivel galáctico está ya decidido. Al fin y al cabo, uno de los posibles finales de todo el universo es quedar inerte y muerto. Pero estas galaxias, probablemente, lo hagan antes que otras todavía vivas.

El asesino de galaxias

Una vez que tenemos claro qué es una galaxia viva y qué no, vayamos a la siguiente pregunta: ¿cómo ocurre la muerte de las galaxias? Esta pregunta era la que quitaba el sueño de varios astrónomos hasta que un par de investigadores han dado con una hipótesis bastante razonable. La muerte de las galaxias ocurre por estrangulamiento. Y el estrangulamiento sucede por la pérdida de todo el gas. Esto puede pasar por la salida "repentina" de todo el gas e la galaxia. Repentinamente es una expresión bastante extraña porque hablamos de miles de millones de años. Pero a escala galáctica es bastante poco tiempo. Para comprobar su hipótesis, los astrónomos midieron el nivel de metales existentes en la galaxia, cosa que se puede hacer mediante Midiendo los metales presentes en una galaxia podemos comparar una galaxia viva y otra muertala observación de diversas ondas y efectos electromagnéticos. Con la formación de nuevas estrellas aumenta el contenido en metales de una galaxia.

Si comparamos el contenido en metales de dos galaxias de tamaño semejante esperaríamos que una galaxia muerta contuviera menos metales, ya que no se forman estrellas nuevas. Sin embargo, muchas de estas galaxias muertas tienen más metales, lo que quiere decir que "algo" ha sacado su gas, más abundante, rápidamente, estrangulando la galaxia y dejándola muerta y más pequeña. Además, para corroborar su hipótesis, comprobaron la edad de dichas galaxias, encontrando una diferencia consistente en lo que tardaría una galaxia viva en morir. Así que ya tenemos una causa y el método definidos. El móvil también podríamos suponerlo: todos los sistemas tienden a la entropía, por lo que es algo natural que ocurra. Ahora solo nos queda saber quién es el culpable. Sin embargo, esa pregunta quedará sin contestar por el momento. Aunque, eso sí, los investigadores ya han dejado claro que tienen a varios sospechosos.