Tablets, tablets, tablets. Tras esos dos años de espectacular subida en las ventas, con las que todo el mundo se hacía con una y llegó a reemplazar la compra de un nuevo ordenador en muchos casos, las ventas se han calmado y se está regresando a niveles un poco más normales. Los fabricantes saben que el primer lugar por el que se entra al consumidor es por los ojos, y tener un bajo grosor, junto a unos marcos muy reducidos, es el primer paso para que una tablet sea considerada atractiva. Con la idea de PhoneArena a cuento de las recientes y ultradelgadas tablets de Samsung, ahí va una lista con las cinco tablets más finas del mercado, a fecha de 13 de junio de 2014:
5. iPad mini
Aunque el modelo actual tiene pantalla Retina, el modelo anterior presentado a finales de 2012 era algo menos grueso. El iPad mini es la versión compacta de la tablet de Apple, que tras ver la longevidad y buenos números de ventas de los modelos de 7 pulgadas con Android acabó cediendo ante lo que parecía un imposible: una versión "mini". Eso sí, de (casi) 8 pulgadas en lugar de las 7 que arrasaban en el mercado. Grosor: 7.2 milímetros.
4. Sony Xperia Tablet Z
Otro modelo añejo que pese a todo sigue en el Top 5. La Xperia Tablet Z fue presentada en el Mobile World Congress de 2012, apenas un mes después de la llegada del smartphone que le daba nombre y que supuso un punto de inflexión en Sony Mobile: el Xperia Z. Trae pantalla de 10.1 pulgadas, 495 gramos de peso, Snapdragon S4 Pro y 2 GB de RAM, así como la certificación IP57 de resistencia al agua y al polvo.
Grosor: 6.9 milímetros.
3. Samsung Galaxy Tab S 10.5
Recién presentada en Nueva York, se ha aupado junto a su hermana pequeña en el tercer y segundo lugar (indistintamente, ambas tienen el mismo grosor). Llegan como la forma definitiva de Samsung de hacer frente a los iPad. Dos modelos con variaciones en cuanto a tamaños de pantalla, hardware potente para apalancarse en la gama alta, pantallas que aspiran a dominar el mercado... Pantalla de 10.5 pulgadas en este modelo, con resolución de 2560 x 1600 píxeles, 3 GB de RAM, Snapdragon 800 / Exynos 5 Octa como procesador...
Grosor: 6.6 milímetros.
2. Samsung Galaxy Tab S 8.4
Y aquí la hermana pequeña de la anterior, para quien busca tamaños algo más manejables. Mismas especificaciones que la Tab S 10.5, mismo propósito: consolidarse como tablet de gama alta con Android por excelencia. Un hueco que, pese a todo, todavía está demasiado difuminado. En otras palabras, convertirse en el iPad de Android.
Grosor: 6.6 milímetros.
1. Sony Xperia Z2 Tablet
Pese a llevar en el mercado varios meses, desde el mes de febrero al presentarse en el Mobile World Congress 2014, todavía nadie ha podido disminuir aún su ridículo grosor. Llega, como su predecesora, inspirada en cuanto a diseño y hardware en el smartphone que le da nombre: 3 GB de RAM, Snapdragon 801, pantalla de 10.1 pulgadas y 1920 x 1200 píxeles de resolución, y certificación IP58 para poder ser sumergible.
Grosor: 6.4 milímetros.
¿Y el resto?
Quizás cinco tablets sepan a poco a alguien que quiere ver una lista un poco más completa. Si ampliamos la lista a diez, quedaría así:
- Sony Xperia Z2 Tablet (6.4 mm)
- Samsung Galaxy Tab S 8.4 (6.6 mm)
- Samsung Galaxy Tab S 10.5 (6.6 mm)
- Sony Xperia Tablet Z (6.9 mm)
- iPad mini (7.2 mm)
- Samsung Galaxy Tab Pro 8.4 (7.2 mm)
- Samsung Galaxy Tab Pro 10.1 (7.3 mm)
- Samsung Galaxy Tab 3 (7.4 mm)
- iPad Air (7.5 mm)
- iPad mini Retina (7.5 mm)
Aquí surge otro debate. Estamos viendo una carrera por crear tablets lo menos gruesas posible. Cuando había otras medidas, como los 13.4 mm del primer iPad, sí era razonable que se tendiese a rebajar el grosor en lo posible. ¿Tiene sentido continuar bajando cada vez más? Pongamos que llegamos en un tiempo a tablets de 4 mm de grosor. ¿No sería mejor mantenerla en 8 milímetros, perfectamente aceptables, otorgando a cambio una autonomía mucho mayor?
En smartphones parece casi unánime que sí deberíamos anclarnos en cierto grosor en favor de la autonomía. En una tablet, donde la autonomía es algo mayor de por sí, y la necesidad de estar siempre conectados es algo menor, quizás sí se prefiere un diseño más atractivo. Vota: ¿qué prefieres, sacrificar autonomía para obtener un menor grosor, o un mayor grosor a cambio de mayor autonomía?
Me mojo: yo prefiero que mantengamos grosores actuales o de hace dos años y a cambio haya espacio para baterías más duraderas. ¿Y tú?