Hasta el día de hoy se hablaba del guepardo, un espectacular felino africano, como el animal más rápido del mundo debido a su sorprendente velocidad al correr; sin embargo, hoy un equipo de estudiantes de la Universidad de California en los Estados Unidos ha descubierto que el _Paratarsotomus macropalpis_, una especie de ácaro californiano, es el que verdaderamente merece este título.
Como publica la prestigiosa _Science Magazine_, los investigadores han logrado grabar en vídeo, usando cámaras especiales para altas velocidades, al minúsculo ácaro recorriendo un máximo de 322 veces su tamaño corporal en un segundo, una cifra increíble.
Por supuesto si hablamos de distancia real, el guepardo sigue ganando, pero si hablamos en distancia corporal recorrida en segundos (que es en lo que se basa el estudio y el nuevo récord), el guepardo "apenas" recorre un máximo de unas 16 veces su dimensión corporal por segundo, mientras que el pequeño ácaro de origen californiano multiplica por mucho esta cifra.
El nuevo récord mundial lo consiguen al haber estado buscando si existe un límite para la velocidad a la que una extremidad puede moverse, dependiendo de su peso, lo que no han encontrado todavía. Esta investigación podría ser la base del desarrollo de robots súper rápidos, que sigan el camino de ese curioso pero perturbador Cheetah de Boston Dynamics.