Así como algunos recuerdan con cariño muchas de las películas que vieron en los años ochenta, otros parecen disfrutar destrozando la memoria emocional de esas mismas generaciones a base de torpes remakes que ni aportan nada nuevo a las películas originales, ni convencen realmente a las nuevas generaciones. Nightmare on Elm street, Fright Night, Conan o Total Recall son algunos de los ejemplos de ineficaces versiones renovadas que nunca deberían haberse realizado. Cierto es que también podemos citar algunos positivos como el de Star Trek, que consiguió verdaderamente relanzar una de las sagas galácticas más entrañables entre el público, logrando interesar a los que no habían visto la serie creada por Gene Roddenberry, pero respetando su modelo original. Pero como las buenas intenciones no van siempre seguidas de los mismos buenos resultados, lamentamos tener que comunicar que una nueva catástrofe cinematográfica podría estar acechando ahora que pretenden hacer una **nueva versión de las aventuras de Snake Plissken*, que comenzaran en 1981 con Escape from New York.

Silver Pictures ha llegado a un acuerdo con Studio Canal para preparar lo que sería el reboot* de la película de culto que dirigiera John Carpenter en 1981, y en la que Kurt Russel interpretaba a su mítico protagonista. Una película independiente que, con un ajustadísimo presupuesto de 6 millones de dólares, consiguió recaudar la nada desdeñable cifra de 245 millones de dólares en su distribución internacional. No es de extrañar que en 1996, protagonista y director repitieran en una secuela, Escape from L.A. La idea de relanzar esta serie no es nueva, el remake ya se planteaba a través de Warner y New Line desde 2006, teniendo como reclamo a Gerard Butler para interpretar a su protagonista. La cancelación del proyecto, hace apenas dos años, supuso una alegría para muchos. Sin embargo, no sólo parece ser que han retomado la idea, sino que se ha expandido ahora al plantearse en forma de una trilogía.

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En 1997: rescate en Nueva York, título de la película para su distribución en España, a pesar de que Sanke Plissken era un convicto considerado peligroso, era escogido para una misión especial, la de rescatar al mismísimo presidente de los Estados Unidos de América, cuyo avión había sido secuestrado por un grupo radical. Un accidente les obliga a realizar un aterrizaje forzoso en la isla de Manhattan, reconvertida en estos violentos tiempos en prisión de máxima seguridad, lo que pone al presidente en una situación extremadamente delicada. La elección de tan peculiar individuo para realizar el rescate se debe a que antes de convertirse en un peligro para la sociedad, Snake Plissken habría sido un eficiente soldado estadounidense, que se había convertido en renegado tras perder un ojo en combate.

Y aquí es donde pretenden comenzar la historia, en lo que sería la precuela de Escape from New York y el relato de cómo Snake Plissken pasó a convertirse en un antihéroe. Todo apunta a que, visto que 1997 no ha sido tan apocalíptico como John Carpenter lo dibujara en 1981, planean un nuevo futuro distópico alternativo para el relanzamiento de la serie que ni necesariamente tendrá que transcurrir después en Nueva York para su segunda entrega ni en Los Ángeles para la tercera.

No sé si servirá para avalar la propuesta o para desestimarla definitivamente, pero hay que recordar que Joel Silver, el hombre detrás de Silver Pictures, estrenó su primera producción, 48 Hrs., dirigida por Walter Hill, precisamente un año después de que John Carpenter estrenara la suya. Responsable también de otras exitosas franquicias como las de Lethal Weapon, Predator, Die Hard o más recientemente, Matrix, quizás pretende ahora quitarse la espina por no haber llegado a tiempo en su momento, desquitándose con el remake de Escape from New York.

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